«Habréis oído que estamos cansados, es lo que algunos querrían, pero ni estamos cansado ni nos cansaremos hasta conseguir la independencia». La consigna lanzada por la presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Carme Forcadell, fue clara: dejar atrás las divisiones internas, recuperar la ilusión y no dejar escapar la ocasión de convertir las elecciones previstas para el 27 de setiembre en el referéndum que el Estado se niega a convocar.

Con ese objetivo, la ANC ha reunido este atardecer a cerca de 2.000 personas en el pabellón de la Fira de Cornellà. Lo ha hecho en un acto político en el que han marcado las líneas generales para los próximos meses, en los que encaran retos del calibre del relevo en la cúpula de la ANC y las elecciones municipales. Todo antes de llegar al plato fuerte de las elecciones plebiscitarias del 27 de setiembre.

En el discurso que ha concluido el acto, Forcadell reivindicó que están prepadados «para asumir todas las responsabilidades que comporta» y que ya han «desconectado del Estado español». También ha tenido un recado para los partidos, a los que ha pedido «sentido de estado y de país». «Ni dilaciones ni retrasos, no queremos más peleas ni desacuerdos, queremos unidad en la acción política y firmeza», añadió Forcadell, que ha concluido con contundencia su discurso: «Nos dijeron que el 11 de setiembre de 2012 seríamos cuatro gatos en la manifestación, nos dijeron que la Vía Catalana de 2013 era imposible, nos dijeron que la V de 2014 era una quimera, y ahora nos dicen que las elecciones del 27 de setiembre son normales. Pues no, las elecciones del 27S son definitivas, votaremos y ganaremos la independencia».

Pero antes de poner el foco en el 27S, el miembro del secretariado nacional Pere Pugès ha sido el encargado de resumir el posicionamiento de la Assemblea ante las elecciones municipales del próximo mes de mayo, para las que ha lanzado la campaña «Ajuntaments per la independència» con el objetivo de que el máximo número posible de candidaturas incluyan los cuatro puntos propuestos por la Assemblea. El primero es la adhesión o la participación activa del Ayuntamiento en la Associació de Municipis per la Independència (AMI), seguido del compromiso de promover campañas desde cada Ayuntamiento a favor del carácter plebiscitario de las elecciones del 27S.

El tercer punto propuesto por la ANC es que el Ayuntamiento se ponga a disposición del Govern «en todo lo que haga falta» si el 27S hay mayoría independentista. Por último, la ANC insta a los alcaldes y alcaldesas a participar en la asamblea de cargos electos «que se constituirá para dar apoyo al proceso de constitución nacional». Una asamblea que tendría que asumir la gobernación de Catalunya en caso de que el Estado suspendiese las instituciones autonómicas. Según ha explicado Pugès, la ANC dará apoyo público a todas y cada una de las candidaturas municipales que incluyan en su programa estos cuatro puntos.

Antes, miembros de diversas asambleas sectoriales de la ANC, desde la de economistas a la de jóvenes, pasando por la de inmigración o servicios sociales, han enumerado sus objetivos para los próximos meses, en los que la entidad soberanista aspira a ensanchar la base social de independentismo. Eso y seguir internacionalizando el proceso, con el objetivo de que el 27 de setiembre no haya dudas en la comunidad internacional sobre el carácter plebiscitario de las elecciones.