Los azules apenas se han visto contestados por los colorados en un arranque intenso de partido, un comienzo igualado (4-3, 6-9) que en ningún hacía pensar en el derrumbe posterior de los derrotados.

Tras ese comienzo más que interesante, Bengoetxea VI-Untoria han enganchado un parcial de 0-12 (2-18 del 4-3 al 6-21) que han dejado barridos a sus rivales y más que sorprendida a la animosa afición citada este domingo en Miribilla.

Se han sucedido los errores de Zubieta y, sobre todo, de un Pablito Berasaluze que parecía acusar tanto la primera escapada azul como la presión de tener que devolver a Bizkaia una txapela que ya tendrá que esperar al menos otro más. Y van 35.

Lo interesante, lo de enjundia, ha ocurrido al principio, cuando Pablo y Oinatz rivalizaban en intensidad y poderosos remates ante la miradas de unos Zubieta y Untoria que esperaban su momento.

Un fallo de Zubieta ha puesto en marcha el marcador, que ha cambiado de bando con dos grandes pelotazos del de Berriz (2-1), al que ha contestado el de Leitza casi de la misma manera (2-3).

Dos entregadas de Untoria, una arriba y otra abajo, han dado de nuevo ventaja a los colorados (4-3). Aunque nadie podía esperarlo, esa ha sido la última vez que la pareja derrotada se ha visto por delante en el marcador.

Oinatz ha cogido velocidad de crucero y ha sumado tres tantos más (4-6) hasta que le ha frenado el tercer error de Untoria (5-6). El último que ha cometido el de Nájera, quien, como su compañero en los cuadros alegres, ha empezado a dominar en su zona de manera incontestable.

Un fallo de Berasaluze y dos excelentes acciones de Bengoetxea han avisado de la escapada de los azules, que ha frenado Pablito con su última acción brillante. Un remate cruzado al frontis que ha puesto el 6-9 en el electrónico.

Hasta ahí han llegado los colorados y el partido, que se ha ido ladeando cada vez más para los azules ante la desesperación de un Berasaluze que veía como por tercera vez en su carrera, y ya con 37 años, se le iba la oportunidad de calzarse una txapela grande.

Oinatz ha ido agigantándose a medida que disminuía Pablo, Untoria dominaba cada vez más a un Zubieta que no podía con tanta tarea como le llegaba y el 6-21 que ha llegado a reflejar el marcador era lo suficientemente elocuente respecto a lo que pasaba en la cancha.

En un arranque de orgullo, la pareja Berasaluze-Zubieta ha logrado un tanto más (7-21), un remate del de Berriz que casi levanta Untoria antes de que un error garrafal a pelota franca de Pablito cerrase una final que prometía mucho en el arranque y ha muerto pronto (7-22).

Lo que ha tardado Bengoetxea en tomar el mando y Berasaluze y Zubieta en acusar los momentos críticos que les deparó el juego.

Marcador: 0-1, 2-1, 2-3, 4-3, 4-6, 5-6, 5-9, 6-9, 6-21, 7-21 y 7-22.