I.Oiarzabal - A.Manterola - I.Carrillo - T.Fernández

Raúl Villar (CCOO): «Se ha reducido a mínimos la inversión productiva»

1. Observando los datos con los que se ha cerrado el ejercicio de 2015 en el capítulo de empleo/desempleo, ¿qué perspectiva tienen de cara al próximo año y a medio plazo?

2. ¿Qué medidas implantadas en los últimos años consideran que han sido positivas para la creación de empleo, es decir, para reducir el número de personas en paro?

3. ¿Qué medidas ha planteado o ha puesto en marcha con el objetivo de la creación de empleo la organización a la que pertenece?

4. ¿Cree necesario implantar programas específicos para determinados grupos de población: jovenes, mujeres...?

5. ¿Cómo valoran las políticas de empleo que las distintas instituciones han desarrollado en los últimos años como respuesta a la crisis económica?

6. De forma resumida, ¿por qué tipo de empleo apuestan: contratos indefinidos o temporales, horarios flexibles o fijos, salarios establecidos por convenios sectoriales o ligados al rendimiento de la empresa…?

1. Las perspectivas son malas. Vemos como la economía está creciendo a un ritmo del 2,9% en términos interanuales, pero esta mejora no se está trasladando al ámbito del empleo. Navarra cerró 2015 sin generar apenas ocupados, y el descenso en el paro en 5.000 personas se debe a la reducción de la población activa, es decir, gente que deja de buscar empleo ante la falta de expectativas para encontrarlo. Los recortes contemplados en los presupuestos del nuevo Gobierno de Navarra en política económica y de empleo pueden empeorar la situación, al reducir los estímulos que necesita el tejido productivo para impulsar la actividad y el empleo.

2. Las políticas de austeridad y recorte aplicadas en los últimos años bajo el dogma del neoliberalismo han sido un lastre para el empleo. La reforma laboral ha dinamitado los equilibrios entre capital y trabajo, y se ha reducido a mínimos la inversión productiva y la política industrial, contribuyendo a la paralización de la actividad económica. En ese escenario, en el final de la legislatura anterior impulsamos el “Acuerdo para la reactivación de la economía y el empleo”, que fue un punto de inflexión importante en la política económica. El acuerdo inyectaba 545,5 millones de euros al fomento de la inversión productiva, la I+D+i, el fortalecimiento del tejido industrial y la inversión en las personas, especialmente en los colectivos que peor lo están pasando, para mejorar su empleabilidad. Lamentablemente el Acuerdo no ha podido desarrollarse.

3. CCOO ha planteado al nuevo Gobierno de Navarra tres prioridades que a nuestro entender debería poner en marcha de manera urgente: 1) impulsar la inversión productiva a través de los presupuestos: una inversión pública dirigida a reactivar la economía, la creación de empleo y el cambio de modelo productivo con una política industrial proactiva, fomentando la I+D+i y la internacionalización de las empresas. 2) impulsar las políticas activas de empleo que deben jugar un papel fundamental, para que puedan ofrecer una atención integral y personalizada y proporcionar la formación, los itinerarios personalizados, los incentivos y la gestión de ofertas y demandas imprescindibles para atender a las personas desempleadas. Mejorar la empleabilidad y las condiciones de los colectivos más desfavorecidos debe ser objetivo prioritario, poniendo especial acento en los jóvenes, las mujeres, los parados mayores de 45 años y los de larga duración. 3) un plan de choque contra la precariedad y por la calidad del empleo, consensuado con los agentes económicos y sociales, que revierta los aspectos más nocivos de la Reforma Laboral, que apueste por el fortalecimiento de la negociación colectiva y que establezca mecanismos para impulsar la estabilidad del empleo y perseguir el fraude en la contratación.

4. La crisis económica y las políticas aplicadas para enfrentarla han castigado en mayor medida a los colectivos cuya posición ya era más vulnerable en relación al acceso al mercado laboral. Por ello es necesario impulsar políticas activas de empleo orientadas a la realidad específica de cada colectivo, poniendo especial acento en los jóvenes, las mujeres, los parados mayores de 45 años, los de larga duración y los colectivos en riesgo de exclusión social. En este sentido vemos con preocupación los recortes que está planteando el nuevo Gobierno de Navarra: más de 30.000 personas, especialmente las más vulnerables, van a dejar de recibir servicios de empleo como consecuencia de los recortes en los programas de orientación, formación, igualdad y fomento de la empleabilidad.

5. Las políticas aplicadas bajo el dogma de la austeridad sólo han traído consigo más paro, más precariedad y más desigualdad social. La economía crece pero no se redistribuye de manera equitativa, por el contrario, la riqueza cada vez se concentra en menos manos mientras se extiende la pobreza entre cada vez más capas sociales. Ante este escenario, CCOO reclama un cambio en la orientación de las políticas. Urge revertir la Reforma Laboral y recuperar los equilibrios entre las partes que operan en el mercado de trabajo. Además, CCOO insiste en impulsar una negociación colectiva que se centre en la recuperación del poder de compra de los salarios, como medida para estimular el consumo y la demanda, y por tanto reactivar la economía y generar empleo.

6. uesta debe ser por el empleo de calidad, debemos mirar al norte de Europa, no ha China o Asia. Perseverar en los recortes nos impedirá avanzar y salir de este escenario de débil crecimiento, por ello es urgente dar un giro en la política económica y apostar por la inversión, el crecimiento, la política industrial y la reactivación de la demanda interna, que es lo que necesita la economía para conseguir una recuperación fuerte y sólida, y que tenga el empleo estable y de calidad como referente.

CCOO pide que se derogue la reforma laboral, se modifique la política económica y un pacto por el empleo de calidad, que revierta los aspectos más nocivos de la Reforma Laboral, que apueste por el fortalecimiento de la negociación colectiva, por la recuperación del poder adquisitivo de los salarios y que establezca mecanismos para impulsar la estabilidad del empleo y perseguir el fraude en la contratación.