Coincidiendo con las fiestas de Lemoa, llega “Hauxe da gure kantua”, cedé que mira hacia la memoria histórica y donde participan bertsolaris, poetas y músicos procedentes de diferentes zonas de Euskal Herria, pero con peso en el aporte que realiza Arratia y la propia localidad. El digipack se compone de doce títulos de diferente orientación musical. La apertura le corresponde a un texto emocionante, como la mayoría, escrito por Igor Meñika y recitado por Nere Sanchez. Siguen Eskean Kristö con una canción rockera muy pegadiza e inspirada. El poeta de Arteaga Igor Estankona escribe y recita “Nagasaki Dresde Gernika”, con la ayuda al piano de Jagoba Ormaetxea, que es el productor del disco, técnico de sonido, arreglista y voz y guitarra en un par de temas. “Memorian gordeak” es una semibalada con cierto aire rockero-metálico. En las voces están Unai Santos (Larregi), Jagoba Ormaetxea (Jare, Autoestéreo) y Mikel Bizar (Jare, Idi Bihotz). Otro corte directo y quedón. Jagoba Ormaetxea interpreta de manera impecable “Ilunpeko lilia”. Una balada con arreglos orquestales, piano.... Muy fina y sensual. La letra es de Rafa Ugalde.

Mikel Urdangarin aporta “Andikona 1936”, sin desviaciones en su calibrado, tan envolvente como se espera. El bertsolari Ibon Iza, de Igorre, escribe “Ilargia ostondu iza” interpretado por Aroa Etxebarria, ex-Amalur, y Bostenbor (Urdaibai), con disco a la espera. Otra voz de calidad, como la de Naroa Gaintza continúa el disco con otra frágil balada, “Saturraran 1938-1944”. Letra de Arkaitz Estiballes, quien también escribe “Amamaren begietan”, con Rafa Rueda a la voz, admirable como siempre.

“Lemona” es un recitado de Eguzkiñe Barandiaran con letra de Telesforo Monzon. El grupo Beira se aproxima con atino a Sorotan Bele. Cierra disco el brillante músico de Artea, Borja Estankona. Letra, voz y acústica (más agradecidos coros finales imn crescendo) para una canción, “Hauxe da gure kantua”, intimista, frágil y con temperamento. Un impecable himno.

Espléndido trabajo grupal y cedé de notable calidad y coherente aun con los cambios de estilo, de tonos y colores. La profesionalidad de todos los participantes logra la unidad, así como haberse grabado en un mismo estudio, Taom, responsables asimismo de un videoclip dirigido por Karlos Trijuecon acierto. El clip rememora una de las batallas entabladas en el 37 en Peña Lemoa. Josu Torrealday, del mismo equipo, completa una portada muy evocativa.

El disco se venderá desde mañana en el Ayuntamiento de la localidad y en diferentes lugares del entorno festivo. Además, a través del código QR se podrá acceder a un blog con las letras.

Inicio trabajo

«Desde hace cuatro años el Ayuntamiento de Lemoa está trabajando en el proyecto que diseñó para los jóvenes del municipio haciendo hincapié en la educación no-formal. En estos últimos cuatro años hemos trabajado en ámbitos como la juventud, memoria histórica, actividad física, solidaridad u otros temas sociales», precisa Mikel Garcia Mugarza, técnico de juventud del Ayuntamiento de Lemoa. «Junto con estos proyectos –añade–, también decidimos participar en los programas de intercambios europeos para que los jóvenes de Lemoa pudieran conocer otras realidades. Así pues, hemos trabajado la convivencia y la paz en Irlanda, la multiculturalidad en Portugal, la participación social en Escocia y este año hemos optado por trabajar la memoria histórica y derechos humanos en Alemania. Continuando en este camino decidimos unir el programa de intercambio con otro de los temas estratégicos en el que llevamos trabajando estos últimos cuatro años, la memoria histórica».

La implicación alrededor de este macroproyecto empezó con gente del entorno del valle de Arratia. Los pilares del proyecto han sido Arkaitz Estiballes, Jagoba Ormaetxea y Saioa Elejabarrieta, la alcaldesa del municipio.

El equipo de estudio de la memoria histórica lo forman 25 personas del municipio entre los 16 y 21 años. «Todo el proceso amplía los estudios desde una manera muy práctica y participativa, lo que se quiere lograr es que los propios alumnos sean conscientes de lo ocurrido y de las consecuencias que trajo la guerra tanto en Alemania como en Euskal Herria. Sobre la elección de Alemania apuntar que existe una unión muy directa entre la Guerra del 36 y la II Guerra Mundial, dado que esta última llegó una vez finalizada. También nos pareció interesante por las diferentes posibilidades que nos ofrecía Alemania, como la visita a varios campos de concentración», precisa Mikel Garcia.

Desde el Consistorio se trabaja en el intercambio de jóvenes y se buscan socios europeos. Mikel Garcia destaca la ayuda de Baskale Elkartea. Las ventas del cedé ayudarán a paliar los gastos del viaje a Alemania.