Arnaitz GORRITI
BILBO

Un derbi con más achaques que objetivos deportivos

Grimau es baja y son duda Rakovic, Vasileiadis, Samb y Moerman. Tabak apela a la «profesionalidad».

Roger Grimau es baja debido a una microrrotura abdominal. (Juanan RUIZ/ARGAZKI PRESS)
Roger Grimau es baja debido a una microrrotura abdominal. (Juanan RUIZ/ARGAZKI PRESS)

Uxue Bilbao Basket y Laboral Kutxa Baskonia recuperan esta noche la jornada 29 de la Liga regular de la ACB, un partido aplazado en su día -debía haberse jugado el 14 del pasado mes de abril- porque los bilbainos disputaban la final de la Eurocup en Charleroi y porque el Baskonia recién regresaba de su doble enfrentamiento de Euroliga ante el CSKA en Moscú.

Con la temporada continental finiquitada y antes de los play offs, este derbi llega más en forma de achaques que de objetivos deportivos. Los gasteiztarras intentan apelar a su «profesionalidad» porque ya no tienen ninguna meta en lo que resta de Liga regular: han confirmado su segunda plaza. Mientras, Bilbao Basket tiene una motivación presente, que es el de afianzarse entre los seis primeros -es el límite para poder asegurar la Eurocup- y seguir en la pelea por acceder a la cuarta plaza, una posición en manos del Valencia Basket, pero que los hombres de negro tienen a tiro, porque si ganan empatarán con la escuadra taronja, un rival que además aún debe visitar Miribilla.

El problema de los pupilos de Katsikaris es físico. Roger Grimau es baja debido a una microrrotura abdominal, mientras que son duda Vasileiadis, ausente ante el CAI Zaragoza, Rakovic, Samb y Moerman, este último por «una contractura en uno de sus gemelos», según Katsikaris.

A pesar de los problemas físicos, el técnico heleno opinaba que «no podemos hacer nada, solo pensar en cómo podemos ganar el partido. Además, el equipo está mejor anímicamente tras la victoria ante el CAI».

En su opinión, la manera de tener opciones para llevarse el derbi es «salir bien, coger la confianza con la defensa y seguir en la misma dinámica en ataque de los últimos partidos».
Mientras, Zan Tabak reconocía que «no nos jugamos nada en cuanto a resultado, pero sí por nuestra profesionalidad, el respeto al rival y la afición».

«Lo que más me preocupa es la preparación mental. Es difícil aunar doce cabezas. Pero debemos jugar por una afición que siempre está con nosotros. La rivalidad debe ser una razón más para afrontar este derbi de forma especial», confesaba el preparador croata.