En declaraciones realizadas en la localidad vizcaina de Durango, Hasier Arraiz se ha referido a las palabras de Urkullu, en las que ha asegurado que había «un compromiso» de un comunicado de desarme total y verificable de ETA que «nunca ha llegado».

Ha recordado que ETA «cumplió su compromiso de abandonar su actividad armada» y ha dicho que «no tiene ninguna duda» de que cumplirá también su promesa de desarmarse, aunque no se pueden «menospreciar las dificultades que existen».

En ese sentido, el presidente de Sortu ha señalado que el lehendakari «es consciente» de esas dificultades para que el proceso avance ya que «desde la Moncloa no le cogen el teléfono» para hablar sobre este asunto. Por ello, considera que debería «comprender las dificultades y aportar en positivo»

También se ha referido al hecho de que el lehendakari haya acusado a la izquierda abertzale de que «quema todo lo que toca y, en este caso, ha conseguido quemar la imagen de los agentes internacionales». En este sentido, ha indicado que «hay dirigentes» que no están demostrando «madurez política y responsabilidad».

Arraiz ha subrayado que «lo importante», en estos momentos es «llevar hasta el final» el proceso «de resolución democrática del conflicto» y ha dicho a Urkullu que «tendrá que decidir si sus manos van a servir para ayudar y contribuir» a ese proceso, o si «su única actitud de aquí en adelante va a ser sumarse al inmovilismo del Gobierno de Madrid y poner palos en las ruedas» para impedir que avance.

Ha insistido en el compromiso de la izquierda abertzale en ese sentido y ha asegurado que actuará «con responsabilidad y con la madurez política que otros dirigentes políticos no están demostrando», al tiempo que ha reiterado su disposición a trabajar con otras formaciones para que el proceso avance.