El Pleno del Ayuntamiento de Gasteiz ha instado al Gobierno local, en manos del PNV, a abrir un proceso participativo que tenga por objeto consultar a la ciudadanía sobre la organización de espectáculos taurinos. Además, ha solicitado al Gabinete de Gorka Urtaran que no prorrogue el contrato de organización, gestión y explotación de este tipo de espectáculos, que concluye el año que viene.

Así lo recoge una enmienda de totalidad presentada por el grupo municipal del PSE, que ha rechazado firmar una enmienda transaccional con EH Bildu, impulsor de la iniciativa original. En la misma la coalición reclamaba el inicio de un procedimiento de rescisión negociada del contrato de la feria taurina de 2016. Una idea a la que se han opuesto los ediles de PNV y PSE, que han advertido del coste que podría suponer la rescisión unilateral del contrato.

Los concejales de Sumando-Hemen Gaude y de Irabazi han criticado que algunas formaciones echen mano de cuestiones económicas para amparar la continuidad del evento en el que se tortura hasta la muerte a un animal. El representante de Irabazi, Óscar Fernández, también ha mostrado su oposición a la celebración de una consulta sobre la continuidad de los toros. «La tortura no es objeto de consulta», ha señalado tras recordar que hace tan solo dos meses Gasteiz se declaró ciudad «libre de maltrato animal».

Por su parte, el concejal del PP Iñaki García Calvo ha defendido la tauromaquia alegando que es un evento «cultural». Además, ha afirmado que la feria de La Blanca tiene un impacto económico en la ciudad. Algo difícil de creer en vista del número de personas que asisten a las corridas de toros, que, en tan solo cinco años, ha pasado de 24.834 espectadores a 9.124.