De esta forma se ha pronunciado la portavoz de Podemos, Laura Pérez, en una rueda de prensa en la que, acompañada por sus compañeros de grupo parlamentario, ha hecho balance del trabajo legislativo de su formación, una de las cuatro que sustenta al Ejecutivo navarro, junto con Geroa Bai, EH Bildu e I-E.

Pérez ha reconocido que en el día a día son «muchas» las veces en las que tienen «sensación de frustración», ya que no siempre consiguen lo que desean o no lo logran con la celeridad esperada.

En este sentido ha apuntado que la propia institución tiene tiempos que impiden que las cosas se puedan llevar a cabo con la rapidez que les gustaría y la emergencia que la sociedad requiere, si bien lo importante es «no perder la perspectiva de dónde se viene» y «todo lo que se está consiguiendo».

La formación morada está siendo «garantía» de ese cambio, jugando un papel relevante desde el Parlamento, según Pérez, quien ha indicado, no obstante que éste debe ser acompañado por cambios desde la sociedad civil, los sindicatos y los movimientos sociales.

Después de resaltar la capacidad de acuerdo y consenso entre los cuatro partidos que apoyan al Gobierno, ha señalado que los ejes fundamentales para garantizar el cambio son el rescate ciudadano, la lucha contra el fraude fiscal, la republificación y la igualdad.

Al entrar se encontraron con una «escasa capacidad de gasto como consecuencia de la situación de quiebra que habían dejado los Gobierno anteriores» debido al «despilfarro», de ahí que, según ha dicho, para ellos sea prioritario profundizar en una reforma fiscal.

En este campo han logrado «pequeños grandes logros» como la reducción de deducciones por planes fiscales y un compromiso para que este año se revise la reforma fiscal, así como un aumento de la partida para contratar técnicos para luchar contra el fraude fiscal.

Entre sus retos ha citado el trabajar por lograr el desmantelamiento del polígono de Bardenas, a lo que ha añadido su disposición a abrir el debate en torno a la banca pública.

Para Podemos, el rescate ciudadano es una prioridad, según el parlamentario Mikel Buil, quien ha incidido en que, partiendo de un «diagnóstico terrible» de fractura social, uno de sus objetivos fundamentales es atacar la pobreza severa.

Entre las medidas adoptadas ha destacado el aumento de la inversión social en dependencia, la atención a la discapacidad, la lucha contra la pobreza, la atención a la diversidad sexual y reproductiva y la apuesta por el alquiler y la rehabilitación.

Esto se materializa en la Ley de Renta Garantizada y Ley de Vivienda y actuaciones relacionadas con el Servicio Navarro de Empleo, el apoyo a un plan integral de economía social y apuesta por corregir los recortes en cooperación al desarrollo.

En este área apuestan por un mayor desarrollo de los servicios sociales, avances para garantizar el derecho a vivienda, la mejora de la participación y la aminoración de la brecha territorial.

Sobre las actuaciones en materia de Igualdad ha hablado la parlamentaria Tere Sáez, quien en primer lugar ha mostrado la alegría de su grupo por la recuperación del cadáver de Blanca Esther Marqués, la mujer muerta en Burlata por su pareja.

Sáez ha valorado el trabajo de su grupo para introducir la perspectiva de género de manera transversal lo que se ha concretado en la creación del INAI, desarrollo de la ley de violencia de género, informes de impacto de género, garantía habitacional para víctimas de violencia machista, talleres de autodefensa, contratación de técnicas de igualdad, análisis de la brecha salarial y el decreto de Salud Sexual y Reproductiva, entre otras cuestiones.

Entres sus retos ha citado la republificación de limpiezas en salud y educación, reducción de ratios en Secundaria, contratación de profesorado, aumento de líneas públicas y descenso de concertada.