Gotzon ARANBURU
AZKOITIA

Ikasgela Ibiltaria

El autobús aparcado frente a la iglesia de Azkoitia luce por los cuatro costados lemas como «Sartu eta ikasi etorkizuneko hizkuntzan idazten», «teknologia sustatu» o «ikasgela ibiltaria, sartu!». Docenas de chicos y chicas han asistido ya a la clase de programación que se imparte en el vehículo, y al terminar la jornada serán más de un centenar los que habrán tenido su primer contacto con el lenguaje digital, el que entienden y comparten desde un ordenador hasta un torno numérico, pasando por el teléfono móvil o la play.

El autobús digital, estacionado en Azkoitia. (Gotzon ARANBURU)
El autobús digital, estacionado en Azkoitia. (Gotzon ARANBURU)

Pocas personas deben de quedar ya en el planeta sin acceso a algún artilugio digital. En los países desarrollados, prácticamente nadie. Pero también son una minoría quienes, entre estos cientos de millones de usuarios, saben cómo se escribe el lenguaje que hace funcionar a todos estos aparatos, el código, el lenguaje de programación. Pues bien, precisamente eso es lo que enseñan los jóvenes monitores que imparten clases de 45 minutos a los niños y adolescentes que se acercan a este autobús, convertido, como dice el lema arriba citado, en aula itinerante. Se trata de una iniciativa de la Diputación de Gipuzkoa materializada por Kode_Eskola.

Naturalmente, en tres cuartos de hora nadie va a aprender a programar profesionalmente, pero sí es tiempo suficiente para que los alumnos tengan un primer contacto con las tripas de esos aparatos omnipresentes en su vida cotidiana. Los más pequeños (8-12) aprenden, jugando, nociones de scratch –programar juegos utilizando imágenes– y de programación sin ordenador, mientras que en el siguiente tramo de edad (8-14 años) se pasa a la creación de videojuegos utilizando herramientas sencillas. Los mayores (12-16 años) reciben las clases Programación I y II, en las que los monitores explican con ejemplos qué son el lenguaje de programación, las variables… y el alumno acaba realizando un pequeño proyecto personal que se lleva a casa. Finalmente, también para este tramo de edad, se imparte una clase de creación de páginas web. «Redes sociales, periódicos online, páginas de fotos… visitamos miles de sitios web. ¿Pero sabías que tú también puedes crear uno? Aprenderemos los conceptos básicos en 45 minutos y a partir de ahí el único límite es tu imaginación» reza la presentación del cursillo.

Goizane Alvarez es directora de Juventud y Deporte de la Diputación de Gipuzkoa y explica que el proyecto del aula digital itinerante forma parte del programa Kultura Digital@, cuyo objetivo último es sensibilizar a los alumnos y profesores de Educación Primaria, Secundaria y Especial sobre la importancia del uso adecuado de las nuevas tecnologías, así como dotarles de instrumentos para desenvolverse con soltura en el mundo digital. Junto al ente foral, son promotores de la iniciativa la Fundación Orona y Kode_Eskola, mientras que la empresa Irizar colabora aportando el autobús en el que está habilitada el aula. 

Desde la Diputación se percibe el riesgo de que se abra en el territorio una brecha digital en función de género, capacidad económica y ubicación territorial de sus habitantes. En pocas palabras, que aunque los usuarios de las nuevas tecnologías somos todos, puede ocurrir que quienes conozcan de verdad su funcionamiento y posibilidades sean mayoritariamente hombres, de un entorno económico holgado y afincados en una ciudad.

Como señala Goizane Alvarez, todos los niños y niñas tienen acceso a una escuela y por tanto aprenden a leer y escribir, pero aprender a programar ya es otra canción. Y la realidad es que la formación en nuevas tecnologías –no hay más que mirar los datos de matriculacion en las facultades de informática– está mucho más extendida entre chicos que entre chicas. Y que un curso de programación cuesta un dinero que no todas las familias pueden gastar. Y que no es lo mismo vivir en Elgeta que en Donostia.

Pues bien, para ayudar a equilibrar esta situación, además del autobús digital, donde se imparten en euskara y gratuitamente los cursillos de programación, la Diputación y Kode_Eskola han organizado Udaleku Digital@, destinado a adolescentes de 12-16 años, en el albergue de Hondarribia. Se impartirá en inglés o euskara, entre el 16 y el 22 de julio y entre el 20 y 26 de agosto, combinado con actividades deportivas y de ocio.

En el caso del barnetegi Udaleku Digital@, el objetivo es ir un poco más allá en materia de programación, un escalón más arriba del nivel muy básico del aula itinerante. Pero en cualquier caso, tanto con el autobús, que parará en una treintena de localidades, como con el barnetegi, el objetivo es divulgar, facilitar un primer contacto con la programación al mayor número posible de jóvenes, no pretender detectar posibles futuros cracks de la informática. 

Desequilibrio entre escuelas

¿Y el sistema educativo, qué papel juega? Como indican los responsables de Kode_Eskola, la programación ha entrado ya en los currículos escolares de Finlandia, Noruega, Canadá, Gran Bretaña y Estados Unidos, entre otros países. Es una tendencia imparable, a lo que ayuda la extensión cada vez mayor del software abierto y la progresivamente mayor asequibilidad del hardware. En nuestro caso, Goizane Alvarez detecta la existencia de un desequilibrio entre escuelas, pues «en algunas los alumnos acceden a los básicos de la programación y en otras se profundiza mucho más, lo que crea desigualdad ya desde una temprana edad escolar. Dado que disfrutamos de un sistema educativo en que las oportunidades son iguales para todos, independientemente de su ubicación en el territorio y del género o nivel económico de los alumnos, necesitamos superar igualmente las desigualdades en materia de programación digital; que sea como las matemáticas o el inglés, igual de accesible para todos», señala Goizane.

Ikasgela Ibiltaria es, además, exponente de la colaboración entre la Administración y el sector privado en el ámbito educativo, un camino menos hollado hasta el momento que en lo referente al deporte, por ejemplo. De hecho, la colaboración con la empresa de autobuses Irizar se venía dando ampliamente en el ámbito deportivo, pero la firma de Ormaiztegi ha aceptado la propuesta de la Diputación de ayudar asimismo en este proyecto de divulgación digital mediante la aportación del vehículo-escuela, que hasta fin de mes veremos en Eskoriatza, Ormaiztegi, Zumarraga, Ordizia o Hernani, entre otras localidades.