El pleno municipal ha ratificado la decisión de la Junta de Portavoces del Consistorio gasteiztarra del 4 de junio de otorgar esta distinción a Zerain, un alpinista nacido en la capital alavesa hace 55 años, en un acto en el que han estado presentes su madre, su viuda, Patricia Pregós, sus hermanas, y amigos del montañero homenajeado.

«Alberto siempre llevó en sus viajes y andanzas el orgullo de sus raíces, de pertenecer a este lugar donde se sentía apreciado y querido», ha recordado su hermana, Ana Zerain, tras la votación del nombramiento, un gesto que ha agradecido.

«En estos momentos de dolor significa un gran apoyo para la familia en todos los sentidos, nos apoya moralmente un montón», ha explicado.

Alberto Zerain Berasategi nació en Gasteiz el 20 de agosto de 1961 y falleció a finales de junio al quedar atrapado por una avalancha mientras escalaba junto a su compañero Mariano Galván el Nanga Parbat, la novena montaña más alta del mundo con 8.125 metros, en la cordillera del Himalaya.

La idea de homenajear a Alberto Zerain partió de EH Bildu, quien propuso al Gobierno municipal (PNV-PSE) la concesión de la Medalla de Oro de la ciudad o en su defecto su designación como Hijo Predilecto por ser «un referente» en Gasteiz y haber «llevado el nombre de la ciudad por todo el mundo».

El alcalde de la capital alavesa, Gorka Urtaran (PNV), ha evocado aquella visita de Zerain a la cueva de los Goros con sus compañeros de clase y su profesor Alberto Samaniego, que abrió la puerta a su pasión por la montaña y la espeleología.

«Cuatro años después se integró en el grupo espeleológico Manuel Iradier para seguir descubriendo nuevas sensaciones en lugares cercanos a Vitoria», ha citado.

De ahí pasó a recorrer Los Andes, en Perú, en el verano de 1983, «donde creyó encontrar el paraíso» y conoció a la que sería mujer. Tras un parón para volcarse en la familia y el trabajo, en 1993 regresó a la montaña, en este caso al Himalaya, y se convirtió en el primer alavés en coronar el Everest, a lo que siguió la conquista de 10 ochomiles.

«La curiosidad y la necesidad de descubrir nuevos retos y culturas, y conocer nuevos amigos, se mantuvieron intactas», ha apuntado el alcalde, que ha recordado la pasión de Zerain por Gasteiz, «por la que siempre demostró un gran amor».

«Atesoraba los mejores valores y cualidades del ser humano. Su solidaridad, humildad, sencillez y bondad, así como una capacidad de sacrificio se multiplicaba en las situaciones extremas a las que obliga la alta montaña», ha agregado Urtaran, que ha recordado cómo «la trayectoria de Alberto ha estado plagada de logros».

Por su parte, el resto de formaciones políticas han mostrado su pésame a la familia y han ensalzado los valores y la solidaridad de Zerain, así como su compañerismo, con el compromiso de «mantener vivo su legado».