Amaia U. LASAGABASTER
Derbi en Ipurua

Una pelea entre dos equipos cargados de ilusión

El Eibar se presenta ante su afición en el primerpuesto de la tabla tras su esperanzador regreso a lacategoría. Por su parte, el Athletic, tras un veranofeliz, busca sus primeros puntos en la Liga.

Como sucedió hace un año, Ipurua estrena la temporada con un derbi. Entonces fue en la primera jornada de Liga, en el debut de los azulgranas en la categoría y con la Real ejerciendo de visitante. Un año después es el Athletic el que aterriza en el remozado estadio eibarrés, para enfrentarse a un equipo que quiere aprender de lo vivido para aprobar a la segunda.

Un partido atractivo, en cualquier caso, pero más aún teniendo en cuenta que armero y rojiblanco son, probablemente, los equipos más ilusionados en esta recta final del estío. Lo está el Eibar tras inaugurar su nuevo proyecto con un espléndido partido en Granada, que le permitió sumar sus tres primeros puntos y, además, regodearse con su primer puesto en la clasificación, una nueva experiencia que añadir a las que viene viviendo en los últimos cursos. Qué decir del Athletic, que en las últimas semanas ha puesto fin a una larga sequía de títulos y viene, además, de conseguir otro de sus principales objetivos de la temporada, clasificarse para la Europa League.

Eso supone, además, que los vizcainos han disputado ya siete encuentros oficiales, lo que les convierte en la escuadra más rodada de la categoría... Pero también en la más amenazada por el cansancio, sobre todo teniendo en cuenta las pocas rotaciones que ha podido introducir en los últimos partidos Ernesto Valverde, con los jugadores justos para completar sus convocatorias –esta vez son 19 y se desplazan todos a Eibar–. El Athletic ya lo pagó en su tercer round frente al Barcelona, lo que le tiene a cero en Liga, y también frente al Zilina, ante el que los partidos se le hicieron largos, aunque concluyeran con final feliz. El Eibar, por su parte, llega mucho más fresco a esta segunda jornada, pero también menos compenetrado, con un equipo repleto de novedades y que se ha ido haciendo conforme transcurría el último mes y medio. No se notó frente al Granada –y eso que los once futbolistas que saltaron de inicio al césped no habían coincidido un solo minuto sobre el césped en toda la pretemporada– pero los guipuzcoanos deberán demostrar hoy si lo sucedido en Los Cármenes tuvo más de trabajo bien hecho que de fortuna, casualidad o endeblez rival.

José Luis Mendilibar es el primero que admite, al ser preguntado sobre sus sensaciones, que no ha transcurrido «más que un partido. Otra cosa es que en la octava el equipo siga transmitiendo esas sensaciones», aunque confía en que lo del pasado lunes «no haya sido un golpe de suerte, sino que sea que el equipo lo está haciendo bien y que cree en sí mismo. Vamos a ver cómo responde ahora».

Sí se congratula el técnico vizcaino de que sus hombres entendieran «bien lo que debían hacer, tanto defensivamente como en ataque», lo que les permitió maniatar al Granada, y también de que, «con cambios sutiles», las «alternativas» que oferta la plantilla permita ofrecer una respuesta similar a lo largo de toda la Liga.

Esta tarde será ante un Athletic que los azugranas afrontan «bien, sobre todo después de haber ganado, aunque sabiendo que por estar líderes no somos los mejores». «Tenemos que seeguir trabajando duro –prosiguió–. Sabemos qué equipo es el Athletic y además para ellos es ya el octavo partido de competición. Eso tiene pros y contras. Vienen competidos pero también han tenido menos tiempo para preparar este partido». En este sentido, insistió en que «han tenido que competir muchos partidos en poco tiempo y eso puede ser un hándicap, porque jugar cada tres días cansa física y emocionalmente. Además han tenido bajas. Pero también vienen con más rito al partido».

Un partido «especial», cmo todos los derbis, pero más aún en este caso para Mendilibar, aunque ya se haya enfrentado a su exequipo con Osasuna. «Son especiales para todos, jugadores, club y afición. Es un partido diferente. Pero hay que afrontarlo como un partido normal, aunque los sentimientos vayan por dentro», aseguró.

Ganas de sumar

También Ernesto Valverde encuentra aspectos más importantes de los que preocuparse, que el aura que rodea a estos partidos. El principal, obviamente, el estado en el que llega su equipo a la cita, tras unas semanas cargadas de esfuerzo y emociones. Confía en que sus futbolistas estén «recuperados», aunque admite que «han sido días duros porque la competición nos ha exigido mucho hasta el último minuto».

Confía en ello y lo desea. Los rojiblancos quieren arrancar cuanto antes en Liga para no vivir una experiencia como la de la temporada pasada. «Somos conscientes de lo que nos costó remontar el año pasado y queremos sumar porque sabemos que comenzar bien te da mucho. En líneas generales hemos empezado bien, ganando la Supercopa y clasificándonos para la Europa League, pero queremos sumar en Liga», subrayó.

No pudo ser frente al Barcelona, así que toca intentarlo ante un Eibar muy diferente al que el año pasado empató en San Mamés y sucumbió ante los rojiblancos en Ipurua, y que ha empezado la temporada de la mejor manera. «Demostró un gran espíritu –destaca Valverde– y se les ve muy implicados y con un gran trabajo defensivo. Intentan adelantar la lúnea cuando pueden, van fuertes y aprietan arriba, como todos los equipos de Mendilibar, y te obligan a un esfuerzo intenso».

Ambiente

Ipurua lucirá un nuevo aspecto para acoger este primer derbi del curso. Concluidas las obras de la Tribuna Norte –las del graderío, aunque no las de la infraestructura completa–, el aforo también será mayor. Lamentablemente, no parece que las casi 6.300 localidades que oferta ahora el estadio vayan a estar ocupadas. Además de que la respuesta de los socios, que no debían pagar para presenciar el choque, es una incógita, más de un tercio de las 600 entradas que se pusieron a la venta el jueves siguen disponibles –podrán adquirirse todavía hoy– y tampoco está claro que las 239 que se enviaron a Ibaigane vayan a agotarse, después de que el plazo para socios se cerrara con más de 60 sin vender.

Habrá ambiente, en cualquier caso, en el estadio y también en las calles de Eibar, con actos organizados por los hosteleros locales y la peña Eskozia la Brava. Así, para los más pequeños, se habilitarán tres zonas con castillos hinchables. Txarangas, teatro de calle, kalejira hasta el campo, una txosna de la peña azulgrana en Unzaga e incluso una parrillada con más de 500 raciones de txistorra y cerveza completan el programa de la jornada.

Los dos técnicos pueden introducir novedades, aunque no hay pistas

Athletic y Eibar saldrán al césped con onces similares a los de sus últimos compromisos, aunque previsiblemente no serán idénticos.

Por parte azulgrana, la principal incógnita atañe al centro del campo. Adrián cuajó un buen partido en Los Cármenes, con gol incluido, pero regresó lesionado y, aunque forma parte de la convocatoria y está en condiciones de jugar, podría ceder su lugar a Arruabarrena. Borja Bastón también podría tener su oportunidad, en detrimento de Sergi Enrich. Sí están confirmadas las dos novedades en la convocatoria, con la entrada de Riesgo –sancionado la semana pasada– y Eddy Silvestre, por Mediavilla, que regresa al filial y un Errasti que vive sus últimas horas como jugador armero.

Ernesto Valverde, por su parte, recupera a Xabi Etxeita y viaja a Eibar con sus 19 jugadores disponibles, los mismos del pasado jueves más el central vizcaino. Con la tralla que llevan algunos de sus futbolistas, es previsible que también realice algunos cambios. Gurpegi, así, podría sustituir a Elustondo en el centro de la zaga, o Mikel Rico dar un respiro a Beñat. También Ibai podría sustituir en la izquierda a Viguera, titular contra el Zilina, o Aketxe situarse por detrás de Aduriz, en sustitución de un Eraso que ha acumulado muchísimos minutos.

La fisonomía de ambos equipos, por otro lado, podría ser diferente a la que presenten a partir de la próxima semana. Mañana concluye el plazo de fichajes y puede haber movimientos. Sobre todo en el bando eibarrés, donde parece confirmada la marcha de Jon Errasti a Italia y la llegada de un pivote de corte defensivo, que bien podría ser Henrique. No parece que se vaya a mover, pese a los rumores de última hora, Borja Ekiza, con el que cuenta Mendilibar.

Valverde, por su parte, aseguró que «nunca se sabe» si puede haber movimientos de última hora. «Somos 23, sin contar a Muniain y Ramalho. No creo que la plantilla sea tan corta. Además, podemos contar con el B y, siendo optimistas, esperamos que Muniain pueda estar antes de Navidad».A.U.L.