El ying y el yang, la noche y el día, la cara y la cruz… Carolina Panthers y Denver Broncos afrontan este domingo por la noche (a partir de las 00.30, hora de Euskal Herria) la edición número 50 de la Super Bowl. El duelo se jugará en el Levi's Stadium de Santa Clara (California), feudo de los San Francisco 49ers, aunque está a 75 kilómetros del Golden Gate.

Los de Charlotte, dirigidos por Ron Rivera, llegan a la final de la NFL tras completar una temporada rayana en la perfección. Con solo una derrota en la temporada regular –20-13 en Atlanta en la penúltima jornada, con todo el pescado vendido–, en los play offs apearon primero a Seattle con un parcial de 31-0 en los dos primeros cuartos y tumbaron a Arizona en la final de Conferencia con una soberana paliza (49-15). El ataque de los Panthers ha sido un rodillo con el quaterback (QB) Cam Newton al mando de las operaciones y el corredor Jonathan Stewart y los receptores Greg Olsen y Ted Ginn como principales escuderos. La exhuberancia de la ofensiva de Carolina no debe ocultar que al mismo tiempo son uno de los equipos que menos puntos encaja.

Denver ha hecho valer su puesto de mejor equipo de la Conferencia Americana, con un balance de 12-4. Con su QB titular Peyton Manning fuera de combate por lesión durante buena parte de la campaña, los Broncos han hecho de su defensa un muro desde el que impulsarse hasta la pelea por el título.

Manning volvió justo para unos play offs en los que su equipo ha sufrido hasta la sirena final para doblegar primero a Pittsburgh Steelers y luego a New England Patriots, vigente campeón, con Tom Brady acosado como nunca por camisetas naranjas. En ataque, los de Gary Kubiak cuentan con Demaryius Thomas y Emmanuel Sanders como principales aliados de Manning.

Diez finales entre ambos

Diferentes en el estilo, y también en su historia. Los Panthers son una franquicia joven, fundada en 1993, que ha jugado play offs en solo siete ocasiones y una única Super Bowl, perdida en 2004 ante New England Patriots.

Denver Broncos nació en 1959. Esta será su octava Super Bowl, igualando a Pittsburgh, Dallas y New England. Sus dos títulos fueron en años consecutivos, 1998 y 1999, y con cinco derrotas son el equipo con más finales perdidas. Aunque el líder moral de esta clasificación es Buffalo, que sufrió cuatro derrotas consecutivas entre 1991 y 1994 y nunca ha ganado.

Por supuesto, no se puede hablar de un partido de estas dimensiones sin dedicar un espacio a los dos hombres en los que se fijarán todas las miradas, dos quaterbacks surgidos de moldes totalmente diferentes pero que tienen en común haber sido número 1 del draft, uno en 1998 y otro en 2011.

Amor y odio

Cam Newton es el Rey Sol de Carolina Panthers, monarca absoluto a sus 26 años. Un QB revolucionario que no se limita a pasar, sino que corre y anota, hasta el punto de haber firmado la friolera de 12 touch downs.

Extrovertido sobre el verde, no duda en celebrar con bailes y gestos cada anotación. Cumple el perfil de deportista adorado por los suyos y odiado por las aficiones rivales, que considera provocativas sus exageradas muestras de entusiasmo.

Al otro lado tenemos a un veterano que cumplirá 40 años en marzo, que sufre el declive de la edad y de las lesiones después de 18 temporadas en la élite. Peyton Manning, de carácter sobrio y poco amigo de alharacas, es el primer QB que juega más de una Super Bowl con dos equipos diferentes.

Se estrenó con su único anillo, en 2007 con Indianapolis Colts ante Chicago Bears. En 2010, con los Colts, cayó derrotado frente a New Orleans. Y ya con Denver, hace dos años encajó una paliza ante Seattle (43-8).

Chaparrón inicial

Los Panthers son favoritos. El aficionado neutral cruza los dedos para que la defensa de Denver aguante el chaparrón inicial y no se repita lo de 2014, cuando Seattle tardó 11 segundos en adelantarse y para el descanso ya les ganaba 22-0. Cuando arrancaron los play offs nos preguntábamos en estas páginas quién pondría el cascabel a los Panthers. ¿Podrá Denver? Parece complicado.

Para los amantes de la farándula, Lady Gaga cantará el himno de EEUU en los prolegómenos, mientras que Coldplay, Bruno Mars y Beyoncé están anunciados para el descanso.

Los Rams dejan Saint Louis y vuelven a L.A.

Al margen de los play offs y del habitual baile en los banquillos, la noticia en estas semanas ha sido que la segunda ciudad más poblada de EEUU volverá a tener una franquicia de la NFL la próxima temporada, con el retorno de los Rams a Los Angeles tras 21 años de éxodo en Saint Louis. Este es uno de los equipos más veteranos, nacido en 1936 en Cleveland (Ohio). En la década siguiente se trasladaron hasta Los Angeles, donde permanecieron medio siglo. En 1995 cambiaron su ubicación a Saint Louis (Missouri), donde lograron su único anillo hasta la fecha, al imponerse el 30 de enero de 2000 a los Tennessee Titans.

«Cuando mucho, cuando nada», reza el dicho, y podría ocurrir que los Rams no fueran los únicos en trasladarse a esta ciudad californiana, ya que los Chargers podrían abandonar San Diego y emular a la NBA, donde Lakers y Clippers compiten por llevarse el favor de los angelinos. Nueva York, con los Giants y los Jets, es la única ciudad con dos franquicias en la NFL.

Había un tercer aspirante a mudarse, unos Raiders que ya jugaron en Los Angeles entre 1982 y 1994. Da fe de ello la película “Straight Outta Compton”, que cuenta la historia del grupo de rap N.W.A. –surgido en 1986– y en la que los protagonistas lucen en sus conciertos prendas del equipo. Finalmente, parece que los de negro se quedarán en Oakland.I. INTZIARTE