La senadora alavesa de Unidos Podemos, Elvira García, que mantuvo el alquiler de un piso de Alokabide cobrando ya un sustancioso sueldo público al tiempo que no pagaba el alquiler e iba a ser desahuciada, ha dejado el partido pero no su escaño. Según informó ayer el secretario de Organización de Podemos Euskadi, Lander Martínez, tampoco daba al partido el excedente de su sueldo como estipula el código ético de la formación.

Elvira García carecía de un currículo político antes de su ingreso en Podemos que contribuyera a su elección como senadora al margen de las siglas por las que concurría. Hace unas semanas se conoció que iba a ser desahuciada de su piso de alquiler público por impago. Ahí se daba una doble irregularidad: tenía ingresos suficientes para pagar y además esos mismos ingresos le situaban ya fuera de los parámetros para acceder a un piso de protección. La senadora se justificó alegando una difícil situación personal ligada a la separación de su pareja.

Tampoco contribuía

Según explicó ayer el secretario de Organización de Podemos Euskadi, Lander Martínez, la senadora tampoco aportaba al partido la parte convenida de su sueldo. Se había iniciado una investigación interna por esta causa cuando conocieron por los medios la amenaza de desahucio.

Elvira García ya ha saldado la deuda con Alokabide y dejado el piso. Ha abandonado Podemos pero se queda con el escaño, con el que pasará al Grupo Mixto. Su partido le exige la devolución del acta de senadora que logró gracias a la formación morada, así como el pago de lo que les adeuda, que no saben si cobrarán.