La escritora Jalida Ghusheh, autora de una novela sobre colaboradores palestinos con Israel, fue detenida ayer por la Policía israelí en su casa de Beit Hanina, en Jerusalén Este, informó la agencia Maan.

La representante de la escritora, Amani Abed al Karim, explicó que los agentes inspeccionaron la vivienda y después se llevaron a Ghusheh a comisaría. Desde allí se puso en contacto con Al Karim para decirle que su detención está relacionada con su libro, aún sin publicar, “La trampa del chacal”, que se adentra en el tema de los «colaboradores», los palestinos que pasan información a Israel de manera clandestina. Estas personas son consideradas «traidoras» por la sociedad palestina, que les acusa de «ayudar a la ocupación israelí», una acción que puede ser castigada hasta con la muerte, como ocurrió el año pasado en Gaza, donde fueron condenadas a la pena capital cinco personas acusadas de este cargo.

El periodista palestino Mohamed al Qiq ha suspendido la huelga de hambre que mantenía tras llegar a un acuerdo con las autoridades israelíes para ser liberado en abril, según la Sociedad de Prisioneros Palestinos. Comenzó su ayuno el 6 de febrero para protestar por su detención administrativa (sin juicio).