Los enfrentamientos entre las facciones palestinas que se encargan de la seguridad en el campamento de refugiados palestinos más grande de Líbano y un grupo de extremistas islámicos dejaron al menos cinco muertos, entre ellos dos civiles, y 30 heridos en 48 horas. Los choques comenzaron en la noche del viernes, después de que las principales facciones del campo de Ain al-Hilweh, que acoge a más de 61.000 palestinos, incluidos 6.000 que huyeron de la guerra de Siria, lanzaran un nuevo plan de seguridad. Las distintas facciones palestinas presentes en el campo acusan a un pequeño grupo de extremistas islámicos de disparar contra las fuerzas de seguridad, a las que habían pedido que se mantuvieran fuera de su zona de influencia. El Ejército de Líbano no puede entrar en los campamentos de refugiados palestinos.