Un tribunal de Bahrein condena a la máxima autoridad chií del país

Un tribunal de Bahrein condenó ayer al ayatollah Issa Ahmed Qassem, máxima autoridad chií del país, a un año de cárcel, que no tendrá que cumplir, y a una multa de 256.000 dólares, por corrupción e instigar protestas. La Fiscalía acusa al clérigo, de 75 años, y a sus ayudantes de acumular ilegalmente 10 millones de dólares para instigar la agitación social. El clérigo alegó que los fondos proceden de donaciones de chiíes –la mayoría en el país, gobernado por una dinastía suní– destinados a beneficencia.