María SUÁREZ
LONDRES
ATENTADO DEL ISIS EN EUROPA

La Policía británica investiga una red yihadista en la zona de Manchester

La ministra de Interior Amber Rudd reconoce que el identificado como autor del ataque de Manchester, Salman Abedi, «no actuó solo» y la Policía admite: «Está claro que estamos investigando una red». En las últimas horas han detenido en Libia al padre y hermano del yihadista. Además, se han practicado otras seis detenciones en Manchester.

La Policía británica investiga la red a la que perteneciese o proporcionase apoyo Salman Abedi, el identificado como autor de la masacre de Manchester que costó la vida de 22 personas el pasado lunes por la noche.

En el segundo día de investigaciones tras el atentado del Manchester Arena, la Policía británica trataba de indagar principalmente en quién era el atacante kamikaze identificado como Salman Abedi y las relaciones que podría tener con otros grupos. Una tarea que, en parte, se desarrolla estos días por medio de las redadas policiales que desde el atentado están teniendo lugar en la ciudad de Manchester.

La Policía ha situado el foco principal de investigación en las inmediaciones de la vivienda del atacante en el sur de la ciudad, un barrio principalmente poblado por familias musulmanas y donde se efectuaron tres arrestos. Posteriormente otro hombre fue detenido en otro distrito de Manchester, con lo que las personas en custodia policial en relación con el atentado ascenderían a cinco.

Asimismo, la agencia Reuters informaba de la detención en Libia del hermano menor de Abedi y de su padre. Precisamente, este último había insistido en la inocencia de su otro hijo en una entrevista con Associated Press. «Nosotros no creemos en matar inocentes», había defendido.

También se ha efectuado el registro de una vivienda del centro de Manchester, donde se efectuó una explosión controlada para acceder a su interior.

«Está claro que estamos investigando una célula», reconocía el jefe de la Policía de Manchester Ian Hopkins, por lo que la hipótesis de que el autor de la masacre actuase en solitario pierde toda su fuerza.

Según informó la BBC, es probable que Abedi hiciera de portador del explosivo, que habría sido fabricado por otra persona.

La ministra de Interior Amber Rudd admitió escuetamente que «el principal sospechoso de los ataques ya era conocido por la Policía». Lo que Rudd declinó detallar es hasta qué punto Abedi estaba fichado o era considerado una amenaza.

Los vecinos del barrio de Fallowield, donde residía Abedi, reportaron que sus padres habían llegado a Gran Bretaña huyendo del régimen de Gadafi, pero que en 2011 habían regresado a Trípoli. El imam de la mezquita de Didsbury, a la que Abedi acudía a rezar, no se extrañó por lo sucedido. Mohammed Saeed El-Saeiti aseguró que Abedi «había enseñado su rostro del odio» en un discurso en el que imam había criticado y advertido de los peligros del Estado Islámico. «Él no es como yo», aseguraba.

Al parecer, según el ministro de Interior francés, Abedi había viajado a Siria donde había sido entrenado para cometer la masacre. Posteriormente había regresado a Libia, desde donde había vuelto a Manchester dos días antes del ataque que acabó en tragedia.

Filtraciones de Trump

Las informaciones a cuentagotas que han venido proporcionando la Policía británica y el Gobierno de Theresa May han sido complementadas con otras fuentes. La tradicional prudencia de las autoridades británicas para proporcionar información sobre los detalles de la operación policial se ha visto superada por las filtraciones que, aparentemente, habrían salido de la Administración de Donald Trump. De hecho, los medios estadounidenses fueron los primeros que reportaron que el ataque del Manchester Arena tenía todas las características de «un acto terrorista» y quienes revelaron la identidad del atacante y la manera en que fue reconocido, al parecer, por una tarjeta bancaria que tenía en el bolsillo de su pantalón.

La edición del “New York Times” mostró ayer fotografías de elementos encontrados en el lugar del atentado, como baterías, metralla o lo que parece ser un detonador. La ministra Rudd expresó su malestar por estas filtraciones y, según aseguró a la BBC, así se lo ha hecho saber a la propia Administración Trump. Desde EEUU, el Jefe del Comité de Inteligencia y miembro de la Cámara de Representantes Adam Schiff reconocía que «si realmente esa filtración ha salido de nosotros, tenemos un problema y el Gobierno británico tiene todo el derecho a estar molesto».

 

Gran Bretaña: posibilidad de atentado inminente

Tras el ataque yihadista del lunes y en vista de que la investigación arroja datos que evidencian que Salman Abedi pudo contar con una red de apoyo para preparar el atentado, el Centro Conjunto de Análisis del Terrorismo, dependiente de los servicios de Inteligencia británicos, ha decidido elevar la alerta antiterrorista de 4 –atentado altamente probable– a 5 –posibilidad de atentado inminente–.

En la práctica, ello supone un aumento de la seguridad con la presencia de efectivos militares por las calles en los principales puntos de interés del territorio.

Desde ayer se puede ver la primera oleada de 984 soldados británicos que, bajo las órdenes de la Policía, patrullarán las inmediaciones del Parlamento de Westminster, de Downing Street o de Buckingham Palace.

Según anunció la ministra de Interior Amber Rudd, se estima que un total de 3.800 efectivos del Ejército se desplegarán por todo el territorio (sobre todo en las ciudades clave como Londres, Manchester o Birmingham) para complementar la labor de los efectivos policiales armados.

Los aeropuertos y lugares y eventos con especial aglomeración, como la final de la copa de Inglaterra que tendrá lugar este fin de semana en Londres, o el maratón de Manchester, serán otros de los puntos clave dotados con medidas de seguridad especialmente altas.María SUÁREZ