La actualidad del Athletic funciona en dos planos distintos. Por una parte, las reacciones al inminente fichaje de Mikel Merino por el Newcastle, y por el otro, el partido de ida de la ronda eliminatoria de Europa League que afronta el club bilbaino en el estadio del Dínamo de Bucarest, una realidad lo suficientemente urgente y atractiva como para prestarle atención a nada más que a ese encuentro.

«En cuanto a Merino tengo poco que decir. En cuanto que conozco a su padre, desearle lo mejor», se limitaba a señalar Kuko Ziganda en su alocución previa al duelo de esta tarde, bastante más preocupado por el desempeño de sus muchachos y por un Dínamo de Bucarest al que bajo ningún concepto se quiere despreciar.

«Tendremos un adversario muy bien preparado, aunque esperamos lograr un resultado positivo», resumía el técnico rojiblanco al preguntársele lo que se espera encontrar hoy en el Estadio Nacional de Bucarest.

Después de volar desde Loiu hasta la capital rumana, el club rojiblanco realizaba su última sesión preparatoria, amén de dar las últimas declaraciones. En las mismas, prudencia y respeto ante todo. «Si están aquí es por algo», afirmaba Aymeric Laporte, al tiempo que Ziganda subrayaba el peligro de los atacantes rumanos.

«Conocemos el Dínamo, lo hemos estudiado con atención, sabemos que ha mejorado su juego, sobre todo tras la llegada de (Cosmin) Contra», resaltó Ziganda, que alabó la delantera del Dinamo formada por internacional rumano Sergiu Hanca y el brasileño Rivaldinho, hijo del exatacante del Barcelona, Rivaldo, quien además estará presente en el estadio.

«Destaco mucho su ataque, pero tampoco excluyo la defensa. Deseamos dar el cien por cien en el terreno de juego», apostilló el navarro.

Volver a la misma cancha

El Arena Nationala de Bucarest no guarda un gran recuerdo para varios jugadores del Athletic, ya que allí perdieron por 3-0 la final de la Europa League de 2012. Curiosamente, Raúl García ganó aquella finalísima.

«Tenemos cinco jugadores que estuvieron en la aquella final de la Europa League. Esperamos que mañana –por hoy– jueguen con el mismo entusiasmo», subrayó el entrenador de los leones.

Un centenar de seguidores, con Urrutia al frente, acompañan al equipo

El presidente del Athletic, Josu Urrutia, encabezaba la expedición del club rojiblanco que aterrizó a primera hora de la tarde en la capital rumana para disputar esta tarde frente al Dínamo de Bucarest la ida de la tercera eliminatoria previa de la Liga Europa en el Estadio Nacional de la capital rumana.

Según informaba el club bilbaino, en el avión que por la mañana tomaba rumbo a tierras rumanas del aeropuerto de Loiu viajaron un total de 81 personas, de las cuales 36 eran aficionados del equipo rojiblanco.

Tras aterrizar después de cuatro horas de vuelo en Bucarest, donde se registraba una temperatura de 28 grados, los expedicionarios se desplazaron en autobús hasta el hotel de concentración en la capital, para realizar su última sesión de entrenamiento.

Mientras, en Lezama, Joseba Agirre presentaba la temporada 2017/18 del Athletic femenino. El preparador de las leonas apuntó que su equipo tiene «amarrados seis partidos de pretemporada», amén de confirmar que del 31 de este mes al 6 de agosto harán una concentración en la localidad lucense de Villalba. Será la preparación de una campaña distinta, después de una regeneración drástica de su plantilla. «Va a ser una temporada difícil e ilusionante. Se han ido seis jugadoras que han marcado una época, pero intentaremos ser nosotras la sorpresa», dijo.GARA