Joseba VIVANCO
Europa League

Mente fría, corazón caliente

Sin especular con el 2-3 de la ida, los leones –con Aduriz de inicio– no quieren sorpresas ante un rival sin ataduras y obligado a ganar.

Iago Herrerín, que será titular bajo palos esta noche, firmaba no encajar gol ante el Panathinaikos, sinónimo de que los rojiblancos sorteaban la eliminatoria y mañana estarían en el bombo de grupos. Eso, o marcar un gol, para lo que Kuko Ziganda avanzó ayer que Aduriz será también de la partida de inicio, porque un tanto bilbaino obligaría a los griegos a anotar tres para ser ellos los clasificados. Y no parece el Athletic un equipo que vaya a recibir tres tantos en San Mamés... Aunque tampoco nadie daba nada porque en el Apostolos Nikolaidis los leones los hicieran en apenas seis minutos. Quizá por la incertidumbre de estas eliminatorias europeas, seguramente porque el técnico navarro no perdió de vista el martes el agónico pase del Sevilla ante el Basaksehir turco y eso que los andaluces traían un 1-2 de la ida, Ziganda abogó por «mantener la cabeza fría, teniendo en cuenta que ellos no van a venir a mirar San Mamés». Como avisara el martes Herrerín, «también a nosotros cuando nos dan por muertos sacamos la garra».

El PAO llega a Bilbo con «poco que perder y mucho que ganar», como asume el técnico de Larraintzar. Sin ataduras en su juego, con todo por hacer. Esa urgencia le hace más peligroso, pero también más vulnerable ante un Athletic al que le cuestan los rivales que se cierran atrás. «Imagino que intentarán hacerlo bien y disfrutar del escenario. Esperemos hacerles el partido incómodo», señaló el rojiblanco, confiado en que «en casa solemos ser capaces de hacer muy buenas cosas».

Pero Ziganda quiere ser precavido. No quiere alegrías y deja claro que en su equipo «no hay euforias». Según él, lo que tienen es «ilusión y ganas de jugar». A partir de ahí, saben que parten con un marcador que «lo hubiéramos firmado antes de empezar» la eliminatoria, pero no por ello se fía. «Vemos la eliminatoria del Sevilla y cómo el rival se lo juega a todo o nada», advirtió.

El navarro tiene la baja de De Marcos –Unai Nuñez se queda fuera de la lista–, pero solo adelantó la titularidad de Aduriz, y es que no descarta rotaciones teniendo en cuenta el partido ante el Getafe y que el domingo se mide a un Eibar más descansado. «Sí, vuelve Aduriz», se limitó a responder, aunque profundizó en cómo gestionará la presencia del donostiarra. «Con el día a día y por las sensaciones mías porque él quiere jugar siempre. Pero intentaremos que cuando actúe esté en las mejores condiciones posibles» de manera que «cuando llegue mayo esté tan fresco como ahora».

Sobre otro de los nombres por los que se le preguntó, el capitán Muniain, seguramente el jugadador más en forma, Ziganda reconoció que «desde el primer día de entrenamiento está con esa confianza y esa actitud, disfrutando muchísimo y, aunque a veces tenemos que ajustar el dibujo, y sabemos que es capaz de iniciar en banda y desequilibrar por dentro. Pero estamos contentos de que esté con ese punto de confianza y atrevimiento», se congratuló, a la espera de que el de la Txantrea sea también hoy determinante en el juego rojiblanco.

Los griegos, con bajas en defensa

Los leones ya eliminaron al equipo del ‘trébol’ en su anterior enfrentamiento continental, allá en 1968: 0-0 en Atenas y 1-0 en Bilbo (Txetxu Rojo). El Athletic también ganó en La Catedral al otro equipo griego al que se ha medido en Europa, el AEK: 1-0 en la capital griega y 2-0 (Genar Andrinua y Peio Uralde) en la vizcaina.

El Panathinaikos llega sin la compañía de ningún aficionado y con el disgusto añadido al 2-3 de la ida de no haber podido ganar tampoco al modesto Plantanias el domingo en la primera jornada de la liga griega. En ese partido marcó el tanto de los de Marinos Ouzounidis el ariete argentino Andrés Chávez, recién llegado del Boca Juniors y quien podría ser una de las novedades en la alineación visitante. Con la ausencia repetida de su defensor Coulibaly y sobre todo la del poderoso central Rodrigo Molero –lesionado– que se las vio con Aduriz y Raúl García en la ida, los que están son el delantero Guillermo Molins, el capitán Zeca, que marca el juego y los tiempos y ya vio el Athletic en Atenas de lo que es capaz, y el punta brasileño Luciano Neves.

Este último admitió ayer que tienen «difícil» el pase «pero no imposible». Su argumento, que «estamos más preparados que nunca para dar la sorpresa. Esta semana nos hemos preparado bien y vamos a ser los más ofensivos posible para intentar clasificarnos», puso en aviso a los leones el exjugador del Leganés.

Por su parte, su técnico Marinos Ouzounidis reconoció que después del 2-3 de la ida los bilbainos son ahora «favoritos», aunque en la línea de lo que esperan los rojiblancos, dejó patente que su equipo «no saldrá con miedo» a San Mamés.

«Vamos a competir más liberados y si lo conseguimos o no se verá al final. Tenemos que marcar como sea y lo intentaremos con todas nuestras ganas», reiteró en su comparecencia previa a entrenar sobre el césped bilbaino. Ouzounidis consideró que los suyos firmaron «un buen partido» en Atenas «excepto esos seis minutos» en los que el Athletic marcó tres goles y remontó. «Tuvimos opciones de igualarlo, pero no lo conseguimos. En su estadio el Athletic se vuelve más agresivo y la clave será estar lo mas lejos posible del área porque cuando Aduriz y García entran en el área, hay peligro. Si lo logramos tendremos más que ganar que perder», explicó.

San Mamés aguarda un duelo que debería ser vistoso porque el Panathinaikos tiene potencial para ponerte en aprietos. «Son un equipo mejor que el Dínamo Bucarest, somos conscientes de ello», destacaba Beñat ayer. «Sabíamos de su potencial estos últimos meses y lo demostraron allí», reiteraba Ziganda. «El respeto por ellos es máximo», añadió. Mente fría, corazón caliente.

«Hemos visto varias veces el partido de ida»

Beñat Etxebarria acaba contrato en junio próximo y nadie duda de su renovación. Él lo tiene muy claro: «No pienso en nada que no sea el Athletic». Por eso está con los cinco sentidos en el choque de esta noche, ése en el que «esperamos no repetir los errores» del encuentro en Atenas. Para ello, como reveló en su comparecencia de prensa ayer, «hemos visto el partido de ida varias veces». Allí, el Panathinaikos fue dueño y señor durante 60 minutos, esos que no se pueden repetir este jueves. «Tenemos que prestar atención a los pequeños detalles porque sabemos de lo que ellos son capaces», apunta.

El de Igorre reconoce que «el resultado es bueno», pero teniendo claro que no entra en el ADN del equipo especular con él. «No sabemos hacerlo, solo sabemos salir a ganar porque, si no, nos podríamos llevar un susto. Mejor ir a por ellos desde el principio», defendía el vizcaino. Beñat insistió en lo de «ahorrarnos cualquier susto» y es que, según aseguró, «no contemplamos una derrota». Desde luego, no entra en el pensamiento de ningún athleticzale, aun sabiendo que los griegos tienen la exigencia de salir a ganar. «Esperemos acertar nosotros primero», se mostró confiado el mediocampista, para quien el Athletic no lo hizo tan mal ante el Getafe el domingo. «Estuvimos bien, luego son cosas de pequeños detalles», respondió.J.V.