Los sindicatos del régimen, al descubierto

EH Bildu dio a conocer ayer el reparto de dinero público a sindicatos y patronal navarra durante los tres lustros que van de 2001 a 2015. El escandaloso resumen, publicado en una sencilla hoja de excel, da cuenta de hasta qué punto han participado UGT, CCOO y la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN) en el régimen foral caído hace ahora dos años.

Las cifras son obscenas. Durante estos 15 años, UGT y CCOO han sumado de media una representatividad sindical del 57,26%, frente al 42,74% sumado por LAB y ELA. Sin embargo, el reparto de dinero público no ha respetado ni de lejos esta proporción. De los 186 millones de euros repartidos en el periodo, UGT se ha llevado casi 72 millones (38,4%), CCOO ha recaudado casi 63 millones (33,7%) y la CEN ha sumado más de 48 millones (26,1%). Al otro lado de la balanza, LAB ha recibido en 15 años 1,6 millones de euros y ELA, 1,7 millones. Si las cifras marean, quédense solo con estas dos: durante los últimos tres lustros, UGT, CCOO y CEN han recibido el 98% del dinero público presupuestado para sindicatos y patronal, mientras que LAB y ELA, que representan a cuatro de cada 10 trabajadores en los comités laborales de Nafarroa, han recibido un 1,81%.

La implicación de patronal, UGT y CCOO en el engranaje del régimen navarro era sobradamente conocida, pero la información publicada ayer le pone números, porcentajes y hasta decimales. Esa cifra ha sido el precio de la paz social en Nafarroa, que ha ido de la mano de una exclusión de facto de los sindicatos abertzales y que ha tenido como consecuencia una mayoría sindical dócil y obediente, con las tragaderas de un tamaño exactamente proporcional al de sus bolsillos llenos. El principal paraguas jurídico de semejante despropósito –empezando por el Servicio Navarro de Empleo, principal ente repartidor de dádivas– es la ley que regula el Consejo de Diálogo Social, cuya derogación es un paso clave en el desmantelamiento de la arquitectura jurídico-institucional del régimen foral.

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