Un pañuelo gigante con la leyenda ‘Libre’ precede las escalinatas de la basílica.
Los sacos y las esterillas se amontonan en la carpa.
Los cinco jóvenes independentistas que han decidido no presentarse al juicio.
Periodistas aguardan la comparecencia de los cinco.
Asanblea para preparar el día.
Momento de reponer fuerzas.
Los procesados resisten, también, junto a amigos y allegados.
Esas cartulinas serán el único documento identificativo que llevarán en el muro popular.
También llevarán máscaras naranjas y pelucas.
Cada día que pasa, es un día ganado en Aske Gunea.
Aske Gunea de Loiola, un nuevo espacio desobediente
La basílica de Loiola se ha convertido en un nuevo espacio desobediente, un nuevo Aske Gunea para hacer frente a los juicios contra la militancia vasca. (Idoia Zabaleta / ARGAZKI PRESS)
22 SET. 2014
