Mariasun Monzón | Amaia Ereñaga | 7K
Donostia

Zinemaldia

Solo faltan cinco días. Ya asoman las grandes vallas publicitarias que servirán de escaparate del cine que nos viene; los aficionados hacen cola para coger entradas y las salas están listas para acoger a miles y miles de espectadores, los auténticos protagonistas de este festival. Ahora solo falta que comience la función. Desde 7K proponemos un recorrido alfabético por los entresijos de esta nueva edición del Zinemaldia, la 62.

Zinemaldia 2014
Zinemaldia 2014

A de Apertura. Unir la gala de inauguración con la de la entrega del primer premio Donostia de esta edición ha sido la fórmula elegida este año por el equipo dirigido por José Luis Rebordinos para la apertura de la edición número 62 del festival. Zinemaldia arranca fuerte, por tanto, el viernes 19 con Denzel Whashington como figura estelar y los jurados de las distintas secciones como jefes de ceremonia. A partir de entonces, y hasta el día 27, el cine se adueña de la ciudad.

B de Plan B. La mejor forma de disfrutar del Festival es no cerrarse a las películas de la Sección Oficial o Zabaltegi. Son las primeras que nos entran por los ojos, pero no debemos olvidar que la mayoría se estrenarán en un corto plazo de tiempo en las salas comerciales. Así, si no encuentras entradas para esos títulos que, en un primer momento, has elegido, el resto de las secciones nos deparan muchas sorpresas y, además, ofrecen la oportunidad de acercarnos a trabajos que, en muchos casos, no tendremos la oportunidad de volver a ver. Las retrospectivas, Horizontes Latinos, Savage Cinema, Culinary Cinema, Zinemira, lo último de lo realizado en el Estado español, muchos y buenos documentales… Son más de doscientos títulos los que se proyectarán durante los nueve días que dura el Zinemaldia. Así que un Plan B siempre es factible.


La isla mínima. Alberto Rodriguez

C de Cocina. Decir que Gastón Acurio viene a Zinemaldia es, por hacer un símil con el mundo del cine, como anunciar la llegada de, pongamos, Clint Eastwood. El chef peruano, quien ha aparecido recientemente en una lista confeccionada por los mejores críticos y profesionales como uno de los veinte cocineros más influyentes del mundo, ha conseguido situar la gastronomía de Perú entre las más importantes del mundo. Acurio viene porque es el protagonista de ‘Buscando a Gastón’, el documental de Patricia Pérez que se estrenará en la cuarta edición de Culinary Cinema. Y como la ‘especialidad’ de esta sección es unir cocina y cine, Acurio cocinará el día 26. El programa es doble; es decir, doble proyección cinematográfica  –también se proyecta ‘Nerua, un viaje a la esencia’, sobre el restaurante del Guggenheim bilbaino– más cena, todo al precio de 57,2 euros.

D de Documental. Que el cine documental ocupa un lugar destacado en el ámbito cinematográfico de nuestros días es una realidad a la que no es ajena la organización del Zinemaldia. En 2010 ya dedicó una amplia retrospectiva a este formato y los asiduos del festival no olvidarán trabajos como ‘El abogado del terror’, por poner un ejemplo. En esta 62 edición, podremos disfrutar de más de treinta títulos, que abarcan distintas temáticas y realidades. Por citar algunos, el que Wim Wenders dedicará al fotógrafo brasileño Sebastiao Salgado, ‘The sal of the earth’ (Perlas); el centrado en la vida y trabajo de Nestor Basterretxea, ‘Señales de vida: Nestor Basterretxea’, o el que tiene como protagonista al Mallandain Ballet Biarritz, ‘Notas en movimiento’ (ambos en Zinemira). En Zabaltegi, podremos asistir a la proyección de títulos como ‘Finding Fela’, que explora la figura del Fela Anikulapo Kuti, el creador del movimiento musical Afrobeat; ‘Yume to kyôki no ohkoku / Kingdom of Dreams and Madness’, que desvela los secretos del célebre estudio de cine de animación Ghibli; ‘Le paradoxe de John Malkovich’, ‘El último adiós de Bette Davis’ o ‘Paco de Lucía: La búsqueda’, entre otros. Además, la realizadora Iciar Bollain llega con ‘En tierra extraña’ (Oficial), un trabajo sobre la situación de varios ciudadanos del Estado español que se han visto obligados a buscar trabajo en el extranjero; y en la retrospectiva ‘Eastern Promises. Retratos de Europa del Este’ también podemos encontrar cuatro trabajos documentales. Y más, en Savage Cinema o Culinary Cinema.



Fotograma de ‘Negociador’, de Borja Cobeaga

E de Euskara. Hubo años, no hace muchas ediciones, en los que nuestro cine quedaba circunscrito únicamente a la sección Zinemira, dedicada exclusivamente al cine hecho o producido en Euskal Herria. No nos engañemos, tampoco nos acercamos a la situación ideal, pero la cosa va mejorando. Este año quien quiera ver cine vasco, además de en Zinemira –donde, por cierto, solo se han programado documentales–, tendrá que ampliar foco y buscar en el resto de la programación, e incluso en la sección oficial. Hay películas rodadas en euskara, filmes internacionales con subtítulos en nuestro idioma (patrocinados por ‘Gara’) y producciones vascas tanto en euskara como en castellano. Entre estas últimas, una que promete morbo: ‘Negociador’ de Borja Cobeada (Zabaltegi), en la que recrea en clave de comedia al dirigente socialista Jesús Egiguren durante sus negociaciones con dirigentes de ETA.



F de Fans. Los hay, aunque tampoco tan enloquecidos como en otros lares. Además, ser fan en Donostia sale más a cuenta que en otros festivales porque, como la ciudad es pequeñita, resulta relativamente fácil acceder a los famosos o hasta encontrárselos tomando unos pintxos. Si uno es fan, debe de controlar necesariamente dos puntos: la entrada del hotel María Cristina que da al Urumea y la alfombra de gala de las noches del Kursaal. Y hacerse amigo de los fotógrafos, muy importante.

G de Glamour. Siempre hay poco glamour según los medios de comunicación, reconozcámoslo. Para tomar la temperatura al festival, se suele tener en cuenta tanto la calidad de las películas como los rostros famosos que el festival consigue seducir para que lo visiten. Sin bien es verdad que este de Donostia se caracteriza más por la calidad de las películas y por la masiva respuesta del público, también es cierto que no faltan las estrellas. Este año, además de Denzel Washington y Benicio del Toro, los dos Premios Donostia,   veremos pasar por la alfombra roja a Viggo Mortensen, John Malkovich, Veronika Ferres, Ricardo Darín, Willem Dafoe, François Ozon, Diego Luna, Jessica Chastain, Leonardo Sbaraglia, Matthieu Amairic, Antonio Banderas... También estarán Charlotte Gainsbourg, hija de los míticos Serge Gainsburg y Jane Birkin, a quien pudimos ver en las dos ‘Ninphomaniac’ de Lars von Trier; el protagonista de ‘Los juegos del hambre’, Josh Hutcherson; y el guapísimo danés danés Nikolaj Coster-Waldau, el Jaime Lannister de la serie ‘Juego de tronos’, que causa furor entra las adolescentes –¿y no tan adolescentes?–. La locura está servida.



H de homenaje. El pasado 12 de julio amanecíamos con la triste noticia del fallecimiento de Nestor Basterretxea; y una semana después, el día 20, nos acostábamos con el brutal accidente que había costado la vida a Alex Angulo. Ambos serán recordados en esta edición del Zinemaldia, que les dedicará un reconocimiento especial en su catálogo. También, y ya con aire festivo, el Premio Zinemira a la trayectoria profesional será entregado al realizador bilbaino Pedro Olea, autor de, entre otras, ‘Akelarre’.

I de industria. Llegar al gran público y hacerse con la presencia de la industria del cine son los dos grandes objetivos de un festival de categoría A como el nuestro; no en vano el séptimo arte tiene una doble naturaleza, casi bipolar: la cultural y la económica. No llegamos ni de lejos a los resultados de citas como las del Festival de Cannes, cuyo Marché de Film es el primer mercado del mundo en su sector –más de 10.500 participantes y 1.500 películas en la última edición; ni imaginarse cabe el dinero que se mueve allí–, pero la apuesta del equipo de Rebordinos va encaminada a convertir a la capital guipuzcoana en el punto de encuentro y de referencia para que se hagan negocios, comprar y vender películas o para que surjan proyectos para el futuro. Con la industria latinoamericana en su punto de mira, el festival tiene un departamento exclusivamente dedicado a este trabajo. En 2013, acudieron a Donostia 1.292 profesionales de 826 empresas provenientes de 54 países.  

J de Joyitas. Todo depende de los gustos de cada cual, pero, por si acaso, hemos pedido al periodista cinematográfico Víctor Esquirol que, de lo visto en otros festivales internacionales, nos haga una lista de las joyitas a no perderse. Esto es lo que propone: el documental sobre el músico Nick Cave ‘20.000 day on Earth’, el último trabajo del maestro del anime Isao Takahata (‘Kaguya-Hime no Monogatari’), dos historias sobre adolescentes problemáticos que convencieron en Cannes (la canadiense ‘Mommy’ y la ucraniana ‘Plemya’), el documental sobre el fotógrafo Sebastio Salgado de Wim Wenders (‘The sal of the Earth’), la road movie mexicana ‘Güeros’, que tanto gustó en el Festival de Berlín, y ‘Jauja’, una película de época localizada en la Patagonia, protagonizada por Viggo Mortensen que, dice, dará qué hablar.

K de Kursaal. Los dos cubos diseñados por Rafael Moneo son el corazón desde el que se irriga el festival por el resto de la ciudad. O, más bien, como una especie de panel de abejas, con celdas compartimentadas, donde no para la actividad durante todo el certamen. Con el auditorio como centro neurálgico, en el cubo principal todo gira en torno a la sección oficial y a las galas. Por la mañana, las proyecciones para prensa y público de las películas de la Sección Oficial; por la noche, la puesta de largo con despliegue de alfombra y bullicio de fans y curiosos incluidos. Mientras, durante el día en sus entrañas se sucede el trasiego diario, con ruedas de prensa incluidas, encuentros, entrevistas, citas… y, en la terraza trasera, aprovechando el telón de fondo que ofrece la playa, las sesiones fotográficas de las películas con más punch (sección oficial, premios Donostia y las de Zabaltegi que más quieren ‘vender’ las productoras de cine). En el cubo pequeño, las colas que se suelen formar en su exterior para los pases de las películas de Zabaltegi y Perlas no tienen nada que envidiar a las de la Sección Oficial. Debajo, en su planta baja, interconectando los dos cubos, está Zinemaldi Plaza, el centro de la venta de entradas del festival.



L de Lasa y Zabala. Desde 1990, año en que compitió ‘Ke arteko egunak’, de Antton Ezeiza, la Sección Oficial no contaba con la presencia de un filme en euskara. En esta edición participarán ‘Lasa y Zabala’ (fuera de competición) del donostiarra Pablo Malo; y ‘Loreak’, de Jon Garaño y José Mari Goenaga. La primera reconstruye el caso de los refugiados vascos Joxean Lasa y Joxi Zabala, secuestrados, torturados y muertos en 1983, cuyos cadáveres, enterrados en cal viva, no fueron identificados hasta 1995. ‘Loreak’, por su parte, sigue de cerca la vida de tres mujeres, las tres con vidas distintas pero con una cosa en común: todas ellas han perdido a alguien querido y todas reciben una vez por semana un misterioso ramo de flores de alguien anónimo.

M de Madrugar. En Zinemaldia hay que madrugar, o espabilarse al menos, para comprar las entradas, porque las sesiones con presencia de los actores o directores y las de los fines de semana suelen agotarse enseguida. Hay que madrugar también, o anticiparse al menos a los otros, a la hora de hacer cola con el objetivo de conseguir un buen asiento en la sala. Y, sobre todo, hay que madrugar para disfrutar de algo que un cinéfilo de pro suele echar de menos el resto del año: el cine en sesión matutina, con sesiones que arrancan a las 9.00. Pero ¡ay del sueño!: la última sesión nocturna suele empezar a las 24.00.

N de Nostalgia. La imagen de Bette Davis recibiendo el aplauso del público, de pie sobre el escenario del Teatro Victoria Eugenia, o enmarcada por el humo de sus cigarrillos hablando con la prensa son algunas de las escenas más memorables de la historia de Zinemaldia. Este año se cumplen nada menos que 25 años del paso de la actriz por el festival, en la que sería su última aparición pública. A sus 81 años, y pese a su delicado estado de salud, estaba disfrutando muchísimo en la ciudad y quiso prolongar su estancia, pero se sintió mal y fue trasladada en un vuelo especial al Hospital Americano de París, donde murió pocos días después. Así se creó, por cierto, la fama de maldito del Premio Donostia. Zinemaldia recuerda a la diva con ‘El último adiós de Bette Davis’, un documental de Pedro González que se proyectará en Zabaltegi. Merecerá la entrevista en exclusiva a Kathryn Sermak, la asistenta personal de la actriz.


O de Oficial. Es la sección estrella del festival, aunque no necesariamente la que mejores películas proyecta. A ella acuden largometrajes inéditos de la producción cinematográfica mundial del año, que compiten por la Concha de Oro. Este año, la inauguración correrá a cargo del estadounidense Antoine Fuqua, que presentará fuera de concurso ‘The Equalizar: El Protector’, protagonizada por Denzel Washington; y la clausura será para Olivier Nakache y Eric Toledano, autores de la aclamadísima ‘Intouchable’, que en esta ocasión se acercarán hasta Donostia con ‘Samba’. Además, entre los directores que presentan película este año se encuentran el bosnio Danis Tanovic, el aclamado director de ‘En tierra de nadie’, que llega con ‘Tigers’; el francés François Ozon, ganador de la Concha de Oro en 2012 por ‘Dans la maison’; el austriaco Michael Sturminger, que presentará una película sobre el mito de Casanova; el alemán Christian Petzold, ganador del Oso de Plata al mejor director en el Festival de Berlín de 2012 con ‘Barbara’; el danés Bille August, autor de películas como ‘Pelli el conquistador’, ‘La casa de los espíritus’ o ‘Las mejores intenciones’, galardonadas con un Oscar y dos Palmas de Oro, entre otros; la danesa Susanne Bier, ganadora del Oscar a la mejor película de habla no inglesa en 2011 por ‘En un mundo mejor’; o el catalán Isaki Lacuesta, ganador de La Concha de Oro 2011 por ‘Los pasos dobles’, un premio muy cuestionado, por cierto.  

P de Perlas. Junto con Zabaltegi, Perlas es la sección favorita de los aficionados al cine. A ella llegan las películas que ya se han presentado a lo largo del año en otros festivales internacionales, avaladas la mayoría por los galardones recibidos en dichos certámenes. Entre los títulos de este año, destacar la ganadora del Oso de Oro en el Festival de Berlín, ‘Bai Ri Yan Huo / Black Coal, Thin Ice’ de Yinan Diao; el film que obtuvo la Palma de Oro en el Festival de Cannes, ‘Kis Uykusu / Winter Sleep’, de Nuri Bulge Ceylan; el Premio del Público en Sundance y Panorama de Berlín, ‘Difret’, una producción de Agelina Jolie dirigida por Zeresnay Berhane Mehari; o la ganadora de la Semana de la Crítica de Cannes, ‘Plemya/The Tribe’, del ucraniano Miroslav Slaboshpitsky. También podemos asistir al último trabajo de Diego Luna como director (‘Cesar Chavez’), una película que recorre la lucha, resistencia y triunfo de esa figura legendaria en los movimientos por los derechos civiles en los años 60 que fue César E. Chávez; y podrán verse las nuevas realizaciones de directores como Isao Takahata, Xavier Dolan, Wim Wenders, Abel Ferrara, Laurent Cantet, Naomi Kawase o Mathieu Amalric.

Q de Qué. Ya están a la venta las entradas, tanto para las sesiones cinematográficas como para las galas de Inauguración, Premio Donostia y Clausura. Los que quieran asistir a alguno de estos eventos, tienen que darse prisa, pues están a la venta ya desde el viernes; el resto de entradas salen a la venta hoy. ¿Qué hacer para la compra de estas entradas? A partir de las 9.00 se pueden adquirir, además de internet (www.sansebastianfestival.com y www.kutxabank.es), en los siguientes puntos de venta: Taquillas del Zinemaldi Plaza (planta baja del Kursaal) y taquillas del centro Kursaal; a partir del día 19, también estarán dispon ibles en el Teatro Victoria Eugenia y Teatro Principal, Cines Príncipe; y a partir del 20, en las de los Cines Trueba y Antiguo Berri. Las entradas del Velódromo también se ponen a la venta en la taquilla nº 23 del Estado de Anoeta dos horas antes del inicio de las sesiones.    

R de Retrospectivas. La sección Retrospectivas ofrece una oportunidad única para redescubrir a los clásicos del cine y/o acercarnos a alguna de las muchas realidades que envuelven al mundo actual. Este año, la clásica está dedicada a Dorothy Arzner (1897-1979), la única mujer que consiguió hacerse una carrera profesional como directora en la época dorada de Hollywoood. Reivindicada por los movimientos feministas en la década de los sesenta del pasado siglo, sus filmes, de un refinado estilo visual, cuestionan los tradicionales roles sexuales y el papel de la mujer en la sociedad; también, según algunos críticos, introducen velados subtextos homosexuales en la rígida estructura de Hollywood de la época. Dirigió diecisiete películas, doce de las cuales (las únicas que se conservan hoy en día) se podrán ver en la retrospectiva que ofrece el festival de Donostia.
La otra retrospectiva, la temática, se presenta bajo el título ‘Eastern Promises. Retratos de Europa del Este’ y ofrece un recorrido por el cine producido desde el año 2000 en la Europa del Este. Cincuenta películas provenientes de países como Bosnia, Bulgaria, Croacia, Eslovaquia, Eslovenia, Macedonia o República Checa,  y muchas de ellas inéditas en el Estado español

S de Savage. Cine de aventura y deportes de acción; pasión, riesgo…, un modo de vida. Savage Cinema es la benjamina de las secciones del Zinemaldia. Comenzó su andadura el pasado año y ya en ese estreno fue casi imposible conseguir entradas para algunas de las películas. El éxito fue total. En esta segunda edición, se presentarán seis largometrajes que ahondan en el mundo de las motos, la escalada, el esquí, skate y snowboard. Seis historias poderosas, en lo humano y en lo visual, cuyos protagonistas ya han anunciado su presencia en Donostia. Para esta edición, se anuncian, además, actividades paralelas, entre ellas, el ride del día 26 para moteros de todos los estilos, que partirá a las 19.00 de Sagües con destino al Velódromo, donde se prevé llegar justo antes de la proyección de ‘On Any Sunday - The Next Chapter’ en esta espectacular sala cinematográfica. Y también el día 26, el flatland Viki Gómez estará en distintos puntos de la ciudad con sus espectaculares acrobacias encima de la bicicleta.

T de Teatro Victoria Eugenia, El edificio diseñado por Francisco de Urcola, inaugurado en 1912, es uno de los teatros más bonitos de Euskal Herria y uno de los de más solera: aquí se estrenaron ‘Vértigo’ y ‘Con la muerte en los talones’, de Hitchcok con gran éxito de público… aunque otro clásico, como ‘Alien’, pasó sin pena ni gloria gracias al jurado, hay que reconocerlo. Desde 1999, el teatro ha cedido el protagonismo del festival en beneficio del Kursaal, pero, para la ciudad, sigue siendo un lugar especial, como lo demuestran las sesiones de Zabaltegi y Perlas con presencia de gentes del cine.

U de unanimidad. Unanimidad no es precisamente un término muy en boga en Zinemaldia, al menos a la unanimidad deseable entre crítica y jurado en cuanto a premios se refiere. Las famosas pitadas –o aplausos, todo hay que decirlo, que solía haber de todo–, pataleos y demás en las ruedas de prensa en las que se daba a  conocer el palmarés desaparecieron con la entrada en la dirección de Zinemaldia de José Luis Rebordinos. Al estilo de otros festivales, los premios y, por supuesto, la Concha de Oro, se dan a conocer en la gala de clausura del Kursaal, en riguroso y televisivo directo.



V de velódromo. Durante unos días, los que dura el Zinemaldia, el Velódromo de Anoeta se convierte en una gigantesca sala cinematográfica en la que se vive el cine en su sentido más popular y espectacular. Oliver Stone fue uno de los directores que inauguró película en la primera sesión de esa macrosala con enorme pantalla, allá por 1986, y tras esa experiencia ha regresado en al menos dos ocasiones más para presentar sus nuevos trabajos en la que calificó como «la mejor sala cinematográfica del mundo». Es un lugar muy especial, al que habría que acudir al menos una vez. Y si no, que se lo pregunten a los más pequeños de la casa, que tienen su propio lugar en ese espacio. Este año, además de la película dedicada al público infantil, se proyectará el film de animación ‘Dixie eta matxinada zonbia’, de Ricardo Ramon y Beñat Beitia; y ‘On any sunday / The nexo chapter’, de la sección Savage Cinema. También, para los que quieran más, está la sesión especial del día 27, que incluye la retransmisión de la gala de clausura y la proyección de las películas de clausura de la sección Oficial y Perlas, ‘Samba’ y ‘Escobar: Paradise Lost’, además de tres cortometrajes del catálogo Kimuak. Eso sí, los que quieran asistir a esta clausura tienen que andar rápidos, pues las entradas vuelan.

W de web. Consultar la página web del festival es una buena opción para no perdernos en un océano de películas, horarios y salas cinematográficas. Es una forma sencilla de consultar la cartelera y, en función de nuestra disponibilidad, seleccionar lo que más nos apetece. Además, ofrece información sobre la venta de entradas y están disponibles las sipnosis de todas las películas, con sus correspondientes fotos. Y si queremos estar a la última, podemos acceder también a todas las noticias que se van generando en torno al certamen.

X - de incógnita. Como la incógnita de saber si las películas son tan buenas como prometen; cuál será la que se lleve el premio del público, y también, la más votada por la juventud. La incógnita de saber si nos encontraremos con esa peli horrorosa camuflada en un elenco de conocidos actores y/o directores o en una atractiva sipnosis. Y, por contra, esa que nos hace vivir el ‘momentico’, esa joyita que ni por asomo esperábamos encontrar. La incógnita, en fin, de lo que nos depararán estos nueve días, siempre cargados de sorpresas y emoción.

Y de Yonquis del cine. La llegada del festival provoca que salgan de sus madrigueras. Los hay de todas las clases y todas las procedencias geográficas, aunque curiosamente abunda el género masculino. Se les reconoce, principalmente, porque se han hecho un master previo de la programación y por su mirada, entre cansada y vidriosa, producto de las pocas horas de sueño y el contraste entre la oscuridad de las salas y la calle. Con su acreditación colgada como si fuera un collar de perlas, los más afortunados de ellos, o pertrechados el resto con las entradas para las sesiones más peregrinas, no cruzan si no es estrictamente necesario –es decir, para ir a dormir o, mejor, cenar de gorra en algunas de las fiestas del festival- un cuadrado geográfico cuyos vértices son el Kursaal y los teatros Victoria Eugenia, Principal y los cines Príncipe. Su alimentación a base de bocadillos tampoco ayuda a que tengan un color muy saludable. Pero disfrutan mucho.

Z de Zabaltegi. Otra sección estrella del festival. A ella concurren algunas de las más interesantes propuestas del panorama cinematográfico del año, propuestas muchas de ellas que, sin embargo, no llegan después a las salas comerciales. Una oportunidad, pues, para disfrutar de ellas. Además de los largometrajes de ficción y de los documentales (ocho, en total), este año la programación incluye la proyección íntegra de la serie televisiva “P’tit Quinquin / Lil’Quinquin”, la sorprendente incursión del cineasta francés Bruno Dumont en este campo; y tres cortometrajes de cineastas vascos: “Hubert Le Blonen azken hegaldia”, de Koldo Almandoz; “Soroa”, de Asier Altuna” y "Zarautzen erosi zuen”, de Aitor Arregi.