El suceso, cuyas causas investiga la Policía foral, ocurrió  cuando Diego L.G., de 40 años y con domicilio en Getxo, murió en el acto al caer de desde una altura de unos 100 metros, la que salva la plataforma desde donde se lanzó sujetado por un arnés y simulando una caída libre, al estilo del «puenting».

Sin embargo, un fallo, humano o técnico, hizo que el hombre, quien sufría una discapacidad motora y se desplazaba en silla de ruedas, se precipitara al vacío.

En una nota, BKZ Navarra Aventura ha señalado que lamenta «profundamente el grave accidente» y ha expresado sus más «sinceras condolencias a familiares, amigos y allegados de Diego».

En la misma nota, los responsables del parque, inaugurado hace un año en este paraje del norte de Nafarroa, en el valle del Baztán, exponen que la instalación cuenta con «todos los permisos necesarios, material homologado, normas de seguridad así como con seguros de responsabilidad civil y asistencia».

«La empresa cuenta a su vez con monitores titulados en actividades de aventura con la máxima titulación y muchos años de experiencia», subraya, para exponer que desde la creación de la empresa, hace 23 años, «es el primer accidente de este tipo».