@gara_iintziarte

Los 28 clavos de Foley sellan el ataúd de Inglaterra

Una Australia sólida en defensa y con un ataque liderado por el apertura de los Waratahs deja a Inglaterra fuera de su Mundial. Sudáfrica se coloca como líder del grupo B tras derrotar a Escocia.

Australia celebra uno de sus ensayos ante Inglaterra. (Adrian DENNIS / AFP)
Australia celebra uno de sus ensayos ante Inglaterra. (Adrian DENNIS / AFP)

Las campanas de Inglaterra tocan a muerto. Stuart Lancaster es un cadáver deportivo. Cuatro años preparando el Mundial, poniendo paños calientes a la falta de juego y resultados, todo con el argumento de que la cita importante era esta... y a la calle en la primera fase.

Twickenham profanada en dos ocasiones, primero Gales y esta noche Australia (13-33). Ambos se jugarán la próxima semana la primera plaza del grupo A. Los de Michael Cheika ganan enteros como candidatos al título.

Los oceánicos han sabido buscar las cosquillas a la defensa local en la primera mitad y además han sido un muro ante las arremetidas de los de la rosa, faltos de ideas. Además, los australianos pescaban en el ruck para recuperar varios balones (3-17).

Ha tirado de orgullo Inglaterra en la reanudación y un ensayo de Watson les ha dado esperanzas (13-20). Pero la amarilla a Farrell en el 70 ha supuesto el fin de un ciclo y Giteau ha puesto el último clavo en la tapa del ataúd.

Si se trata de poner un nombre propio al verdugo de los ingleses, este se llama Bernard Foley. El apertura de los Waratahs de Sidney ha destrozado en dos ocasiones la cintura de la defensa rival para posar otros tantos ensayos en la primera mitad, y además ha estado letal con el pie. Veintiocho de los puntos Wallabies han llevado su firma.



En el grupo B, Sudáfrica ha subsanado su tropezón inicial ante Japón con una victoria ante Escocia que pone en su mano el liderato del grupo B (34-16). A los Springboks solo les resta enfrentarse a la cenicienta Estados Unidos, con lo que la derrota ante los nipones pasará a su historial como una mala pesadilla sin consecuencias.

Frente a los caledonios, los de Heyneke Meyer se han mostrado nuevamente, sobre todo en la primera parte, como un equipo rocoso cuyo juego no enamora pero que castiga a sus rivales como un martilo pilón.



A Escocia la derrota le obliga a ganar a Samoa el próximo sábado, ya que en caso contrario Japón podría adelantarle si derrotara a EEUU un día más tarde. Ello se debe a que los asiáticos se han impuesto con claridad a los samoanos (26-5) gracias a un arranque fulgurante, con el 83% de posesión y el 89% de ocupación en el campo rival en el minuto 25 y un rotundo 20-0 en el descanso. Sudáfrica manda con 11 puntos, por delante de Escocia con 10, Japón con 8, Samoa con 4 y EEUU con 0.

Este Mundial está suponiendo una debacle para el rugby polinesio, ya que ni Fiji, ni Samoa, ni Tonga van a entrar entre los tres primeros de su grupo, lo que supone que ninguno se clasificará directamente para la Copa del Mundo de 2019, cuando hace 4 años Samoa y Tonga sí lograron el billete y Fiji se sumó en las clasificatorias posteriores.



La jornada dominical se presenta propicia para que Argentina e Irlanda sellen un pase a cuartos que nunca ha estado en cuestión. Abren el fuego los Pumas ante Tonga (15.30) y siguen los del trébol frente a Italia (17.45). Dos rivales que, visto su rendimiento en lo que va de torneo, deberían ser presa fácil para los favoritos.  

En los irlandeses, el centro Robbie Henshaw retorna tras ser baja en los dos primeros encuentros, mientras que el zaguero Rob Kearney y el centro Jared Payne están lesionados. En Italia vuelve su capitán, el tercera Sergio Parisse.

Por su parte, el técnico argentino, Daniel Hourcade, reparte minutos y presenta siete cambios respecto al anterior duelo ante Georgia.