Artola ha intentado desde el inicio imponer su mayor golpe, pero un Olaetxea acertado se ha defendido con eficacia. El de Lizartza ha arriesgado en sus remates, pero ha estado especialmente acertado y con cinco tantos ha aguantado a un Artola que ha mostrado ciertas precauciones a la hora de lanzarse a buscar el aire (5-5).

La racha de Olaetxea se ha truncado en un saque-remate, con un gancho al ancho de los que pocas veces falla . Tras ese accidente, Artola no solo ha recuperado el saque, sino que ha entendido que debía dar un paso adelante para deshacerse de ese amigo y profesor del que tanto ha aprendido.

Con el pelotazo inicial como primer argumento –le ha endosado cuatro en un parcial de 12-0–, pero buscando y encontrando el gancho de zurda, el más joven de los dos ha conseguido atropellar a un Olaetxea al que ahora le costaba bastante más defenderse.

Consciente de que puede no tener muchas más oportunidades de jugar un campeonato ante su gente, Olaetxea no se ha dejado llevar, todo lo contrario. Ha demostrado que es un pelotari que merece más oportunidades de las que goza, sobre todo en invierno.

Con su calidad, pero también con su defensa, en una demostración de facultades físicas, ha metido el miedo en el cuerpo de su rival acercándosele en dos ocasiones, primero 14-18 y 17-21 en un segundo arreón que se le ha truncado con una falta de saque, cuando Artola ya empezaba a ver las cosas más complicadas.