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IRUÑEA

El Gobierno navarro subirá el IRPF de forma «reducida» y solo «en las rentas más altas»

El consejero navarro de Hacienda y Política Financiera, Mikel Aranburu, ha anunciado que el proyecto de ley de modificaciones tributarias que pretende llevar a acuerdo de gobierno a finales de este mes repercutirá en diez leyes forales. Ha detallado que la subida del IRPF contemplada en esa reforma es «francamente reducida» y solamente se producirá «en las rentas más altas».

Mikel Aranburu, en una imagen tomada en el Parlamento foral. (Iñigo URIZ/ARGAZKI PRESS)
Mikel Aranburu, en una imagen tomada en el Parlamento foral. (Iñigo URIZ/ARGAZKI PRESS)

Durante su comparecencia ante el Parlamento foral, Aranburu ha presentado la propuesta de reforma fiscal y ha explicado el funcionamiento de la Oficina Presupuestaria.

Entre las diez leyes a las que afectará la reforma fiscal se encuentran la Ley Foral General Tributaria, el IRPF, el Impuesto de Sociedades, el Régimen Fiscal de las Cooperativas, el Impuesto sobre el Patrimonio, sobre Sucesiones y Donaciones, y la Ley Foral de Régimen Tributario de las Fundaciones, entre otras.

En cuanto a la Ley Foral General Tributaria, Aranburu ha señalado que se diferenciará «el derecho a comprobar por parte de la Administración y su derecho a investigar».

También se hará publicidad «de las situaciones de incumplimiento relevante de las obligaciones tributarias», y se ampliará el plazo de las actuaciones inspectoras a 18 meses con carácter general y a 27 meses en casos especiales.

Respecto al IRPF, ha propuesto igualar el trato de las becas concedidas por las fundaciones bancarias al resto de las becas, limitar la exención por trabajos en el extranjero a 30.000 euros al año y no aplicarlo a trabajadores fronterizos y rebajar el límite de aportación a planes de pensiones a 5.000 euros, que serán 7.000 para mayores de 55 años.

Además, se suprimirá la deducción por vivienda habitual y la deducción por trabajo, llegando a los 400 euros como mínimo, y no se podrán deducir las retenciones realizadas por una entidad vinculada si no han sido ingresadas.

En cuanto al Impuesto sobre Sociedades, ha señalado que el tipo general pasará del 25 al 28% y el tipo mínimo pasará del 10 al 13% en caso de entidades a tipo general y del 11 al 9% para pymes.

Para la deducción por empleo se exigirá un salario de al menos 1,5 veces el SMI y que se mantenga la plantilla dos años, y se modificará el porcentaje de retención de capital.

Respecto a las cooperativas, Aranburu ha anunciado que se hará un «ajuste técnico» para coincidir el tipo impositivo con el que aparece en la Ley Foral del Impuesto sobre Sociedades y, respecto al Impuesto sobre el Patrimonio, se reducirá el mínimo exento de 800.000 a 550.000 euros. También se rebajará de 1.500.000 a 1.000.000 de euros el límite para la obligación de declarar.

Relacionado con el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, se añadirán nuevas reglas de liquidación y se evitarán casos de «renuncias ficticias» y sobre las Fundaciones, se establecerá que las rentas e ingresos deberán destinarse a la realización de los fines fundacionales, al menos, el 70% del importe del resultado.

Oficina presupuestaria

Según ha detallado Aranburu, la creación de la Oficina Presupuestaria supondrá un control más «eficaz, ágil y directo» de la ejecución presupuestaria del Gobierno foral, así como la valoración del impacto económico que podría llevar consigo la aprobación de nuevas leyes.

«En 2010 las Cortes Generales aprobaron una iniciativa de ese tipo y nunca se ha puesto en funcionamiento, y en 2014, se firmó un acuerdo para activar esta oficina y ahora se está desarrollando, por lo que nos puede servir de pista», ha afirmado.

Aranburu ha señalado que el caso de Nafarroa «es muy distinto». «Son 50 parlamentarios con acceso a tiempo real a la ejecución presupuestaria del Gobierno, siempre respetando la cláusula de confidencialidad de no conocer los nombres y apellidos», ha apuntado, tras asegurar que su consejería está «a disposición del Parlamento para mejorar este sistema, si no funciona bien, o para completarlo».

Reacciones

En el turno de palabra de los grupos parlamentarios, la portavoz del PPN, Ana Beltrán, ha afirmado que la reforma fiscal anunciada «va a arruinar» a Nafarroa.

«Es una reforma muy perjudicial y dudo mucho de que al consejero le parezca que vayamos a recaudar más. En muchas ocasiones, cuando se reducen los impuestos, se produce un incremento de actividad económica y mayor recaudación. Estos tipos impositivos van a arruinar a nuestra Comunidad. Va a generar una gran deslocalización», ha asegurado.

El portavoz de UPN, Juan Luis Sánchez de Muniáin, ha considerado que la reforma fiscal es «más política que técnica, puesto que no se va a deducir objetivamente ningún beneficio, sino perjuicios para la mayoría de los ciudadanos, y eso no se va a traducir en ningún plan que genere empleo o riqueza».

En nombre de Geroa Bai, Jokin Castiella ha remarcado que le gusta «la música» de los detalles que ha ofrecido Aranburu y ha afirmado que las subidas anunciadas a las rentas más altas se hacen «desde un principio equitativo y progresivo».

El portavoz de EH Bildu, Adolfo Araiz, ha afirmado que la reforma fiscal debe permitir el mantenimiento de los servicios públicos y ha considerado que, aunque el proyecto presentado por el consejero no es el de EH Bildu, «va en el buen camino». «Nosotros íbamos un poco bastante más allá de lo que ha quedado aquí, es una reforma moderada», ha dicho.

Por parte de Podemos, Fátima Andreo ha dicho que UPN «viene con demagogia, porque cuando son ellos los que suben los impuestos con el PSN es algo que hay que hacer, aunque solo se utilice para disminuir la deuda, aunque lleve aparejados deportes, nosotros queremos otro modelo de desarrollo económico y esta reforma fiscal va encabezada a ello».

Ainhoa Unzu (PSN) ha pedido al consejero un «compromiso político» de que una empresa que venga a Nafarroa «no va a pagar ni un céntimo más que en el resto de España o en el País Vasco». Ha advertido además de que «la retención en la nómina nos va a subir prácticamente a todo el mundo».

El consejero ha respondido que él no puede «asumir un compromiso político en cuanto a que nadie va estar en peor situación», aunque, «como dirían en las películas, defina qué es peor». «El compromiso político tiene que ser con la progresividad y equidad, y que Navarra sea un ejemplo en cuanto a eso», ha dicho.

Finalmente, el portavoz de Izquierda-Ezkerra, José Miguel Nuin, ha criticado que hay «una estrategia política de UPN, PSN y PPN de hacer mucho ruido» con la reforma fiscal y ha criticado que «algunos quisieran un modelo fiscal en el que las empresas no pagasen impuestos». «Ese es el modelo neoliberal puro», ha señalado.