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Absuelven a Villadelprat y Payne por la venta de Epsilon

La Audiencia Provincial de Araba ha absuelto al que fuera administrador único de Epsilon, Joan Villadelprat y al director financiero, Mark Payne, de los delitos de administración desleal, alzamiento de bienes e insolvencia punible por los que fueron juzgados por la venta en 2011 de la rama de competición a la escudería Epic Racing.

Joan Villadelprat, en una imagen de archivo. (Gari GARAIALDE / ARGAZKI PRESS)
Joan Villadelprat, en una imagen de archivo. (Gari GARAIALDE / ARGAZKI PRESS)

El fiscal solicitaba una pena de ocho años de prisión para Joan Villadelprat y para el que fuera su socio y director financiero de Epsilon, Mark Payne, al entender que cometieron un delito societario y otro de insolvencia punible por la venta en 2011 de la rama de competición de Epsilon a la escudería Epic Racing, creada por el segundo, después de que ambos fueran conocedores de la situación de insolvencia de este proyecto que aspiraba a competir en Fórmula Uno y que recibió más de 40 millones de euros en ayudas públicas.

La sentencia de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Araba absuelve también a la escudería Epic Racing, a la que el británico Payne vendió la rama deportiva de Epsilon.

La resolución, que puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo, concluye que «no hay prueba directa ni indicio alguno de la existencia de un perjuicio económicamente evaluable» a los otros dos socios de Epsilon.

La Audiencia sostiene que la operación fue planteada «como parte de un plan de viabilidad de la empresa», y que «no hubo ocultamiento ni trama ni ardid para engañar a los socios». En esta línea, indica que estos «ni antes ni después de la consumación del contrato de compraventa con Epic Racing percibieron un artificio que defraudase sus expectativas o confianza».

«No hay prueba de que el señor Villadelprat infringiera, al celebrar el contrato litigioso, el deber de lealtad con los socios inherente a su cargo de administrador», afirma el fallo.

El tribunal estima que correspondía a la acusación acreditar que el valor de los bienes transmitidos fue «notablemente superior al precio estipulado en la operación», tras lo que subraya que la Fiscalía no ha logrado demostrar que esto fuera así.

Por otra parte, destaca que el contrato entre Epsilon Euskadi, S.L. y Epic Racing, S.L. «tenía por objeto una pequeña parte de los activos patrimoniales de la primera». También afirma que «el precio pactado no era manifiestamente inferior a su valor de mercado y se abonó en su integridad».

Villadelprat y Payne fueron juzgados a finales de junio.