La empresa de Muskiz ha emitido un comunicado en el que informa y pide disculpas por las inmisiones del pasado domingo, cuando «se produjeron altos valores de S02  (dióxido de azufre) en la refinería como consecuencia de inestabilidades en las planta de recuperación de azufre, a raíz de un problema operativo en la unidad de HD3».

El diccionario de la Real Academia define «inmisión» como «agresión ambiental o concentración de la contaminación en un lugar y en un momento concretos». El dióxido de azufre es un gas irritante y tóxico, cuya exposición de altas concentraciones por cortos períodos de tiempo puede irritar el tracto respiratorio, causar bronquitis y congestionar los conductos bronquiales de los asmáticos.

Petronor ha añadido que informó telefónicamente el mismo día, tanto al Servicio de Inspección de la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno de Lakua como a las autoridades locales.

Las inmisiones registraron «de forma puntual un valor medio horario de SO2 de 358 microgramos/Nm3, superior por tanto al límite establecido de 350 microgramos».

La empresa puntualiza que «ello no supone en sí un incumplimiento de las normas establecidas, por cuanto que la ley permite hasta 24 superaciones puntuales de este límite al año».