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El Parlamento navarro denuncia los actos del entierro de Sanjurjo con la excepción de UPN y PP

El Parlamento de Nafarroa, con el apoyo de todos los grupos excepto de UPN y PPN, ha aprobado una declaración institucional en la que se rechaza la inhumación en Melilla de los restos del general golpista José Sanjurjo «con honores oficiales» y la «humillación» que esto supone para las víctimas del franquismo.

Un momento de la inhumación de los restos de Sanjurjo en el Panteón de Regulares de Melilla. (GARA)
Un momento de la inhumación de los restos de Sanjurjo en el Panteón de Regulares de Melilla. (GARA)

Así lo recoge la declaración, presentada por Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E, a la que se ha sumado PSN, tras conocerse que los restos del general, exhumados por el Ayuntamiento de Iruñea en noviembre del Monumento a los Caídos donde reposaron durante décadas, fueron enterrados hace un mes en un panteón militar en Melilla.

La declaración institucional advierte de que la ceremonia del nuevo entierro fue efectuada «con honores militares» y «presidida por las autoridades civiles y militares de Melilla y, al parecer, con los gastos a cargo del erario público», lo que «tiene difícil encaje» en la Ley de Memoria Histórica.

Por ello, el Parlamento muestra su «rechazo» y «solicita que se esclarezcan los hechos y se depuren las responsabilidades políticas oportunas», además de denunciar la «humillación que supone este acto de exaltación del genocidio franquista para las víctimas del franquismo», y considerar «necesario» que la Fiscalía actúe en defensa de la víctimas.

Estos dos puntos han contado con el apoyo del cuatripartito y PSN, y el voto en contra de UPN y PPN.

En el tercer punto, que ha contado con los mismos apoyos que el anterior más el rechazo de UPN y la abstención de PPN, el Parlamento de Nafarroa considera «imprescindible» que todos los poderes públicos y el conjunto de las Administraciones Públicas «cumplan en su integridad la Ley de Memoria Histórica, aportando para ello la financiación necesaria».

En declaraciones a los periodistas al término de la reunión de la Junta de Portavoces de la Cámara foral, por UPN Javier Esparza ha justificado su voto en contra de toda la declaración por la existencia de las «informaciones contradictorias» acerca del acto de Melilla, que obligan a conocer primero las explicaciones que ya se han pedido a la ministra española de Defensa.

Esparza ha mostrado su apoyo a la Ley de Memoria Histórica y ha mostrado su «solidaridad» con los represaliados del franquismo, además de asegurar que él no hubiera acudido a un acto como el de Melilla, pero ha señalado que con su voto negativo hoy UPN pretende «no entrar en el juego de intereses» políticos que hay detrás.

Por el PPN, Ana Beltrán ha rebajado la importancia de esta ceremonia «íntima y privada, de cinco minutos» en la que «no hubo en absoluto honores militares» y con asistentes «a título personal» y no institucional, por lo que ha justificado su rechazo a los dos primeros puntos de la declaración que «faltan a la verdad» y ha pedido «rigor».

En el turno de quienes han apoyado la declaración, Koldo Martinez, Geroa Bai, se ha unido al «rechazo» al acto celebrado «con honores» y presencia institucional, ha dicho, lo que supone «un insulto y una humillación para las víctimas del franquismo».

Desde EH Bildu, Adolfo Araiz ha advertido de que «la sola presencia de autoridades», como la confirmada del presidente de Melilla Juan José Imbroda (PP) o del comandante militar de la ciudad, «ponen de manifiesto que ha sido una inhumación con carácter cuasi-oficial», algo «rechazable» al ser un acto de «apología y exaltación del genocidio franquista».

La portavoz de Podemos, Laura Pérez, ha considerado que por solidaridad con las víctimas del franquismo, «este tipo de actos debería conllevar la inhabilitación de los cargos públicos que han participado», al tiempo que se ha mostrado «escandalizada» porque el PP dé más importancia a otros asuntos que a la apología del franquismo, cuando «quizá» el hambre o la corrupción «estructural» en el Estado español deriven de «una transición no resuelta».

Por el PSN, María Chivite también ha considerado «una vergüenza» la presencia de cargos públicos y militares actuales en la inhumación de Sanjurjo y el incumplimiento de la Ley de Memoria Histórica.

Marisa De Simón, I-E, también ha lamentado al ceremonia «totalmente ocultista», «tremendamente grave» y que supone «un insulto» a las víctimas y familiares del franquismo, y por comparación, ha considerado «un escándalo» que el PP haya permitido el traslado en un helicóptero del Ejército de los restos de Sanjurjo de Iruñea a Melilla a la vez que «perseguía» en la capital navarra la exhibición de la bandera republicana el 14 de abril.