Esta concentración se suma a las llevadas a cabo en otras capitales como Iruñea y Gasteiz durante las fiestas. Cientos de personas se han concentrados tras sendas pancartas en las que se pedía la libertad de los encarcelados.

Los hechos se remontan a octubre del año pasado, cuando se produjo en Altsasu una trifulca entre vecinos de la localidad y dos guardias civiles fuera de servicio con sus parejas.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional española solicita un total de 375 años prisión para los ocho encausados, al entender que se trata de un delito de «terrorismo».