La presentación de la Ley de Transitoriedad Jurídica, que no su tramitación, estaba programada para mediados de agosto, pero supuestos desacuerdos entre los partidos sobre la fecha de la aprobacón de la norma retrasaron la comunicación pública. Finalmente, ha sido esta mañana, pasada la resaca de los ataques del 17 de agosto cuando los diputados han presentado una norma cuyo nombre oficial es Ley de Transitoriedad Jurídica y Fundacional de la República.

El diputado de JxSí Lluís Corominas ha tomado la palabra en primer lugar para aclarar que, pese a las informaciones publicadas sobre discrepancias entre partidos independentistas, «todos están de acuerdo en aprobar la Ley antes del 1 de octubre».

También ha explicado que la norma ofrece un marco jurídico al periodo inmediatamente posterior al referéndum: «Si gana el No se convocarán elecciones autonómicas, el marco jurídico es claro y conocido. A partir de ahora, los partidarios del Sí tienen un marco jurídico». El objetivo, según ha insistido Corominas, es doble. Por una parte, ofrecer «seguridad jurídica» y, por otro, contribuir con transparencia al camino hacia el 1-O, para el que solo faltan 35 días.

A su lado, el diputado de la CUP Benet Salellas ha explicado la presentación de hoy «como una interpelación al conjunto del país a que vaya a votar el 1 de octubre».

Tras la breve aparición de ambos diputados en la sala de prensa del Parlament, Corominas y Salellas han explicado que el contenido de la Ley, «largo y con muchas concreciones», será desgranado a continuación en una comparecencia conjunta de los diputados de JxSí y la CUP. En breve, más información.