La mayoría sindical vasca considera que hay que estar al lado del pueblo catalán, ahora que la maquinaría represiva del Estado español les golpea por querer ejercer sus derechos políticos y civiles. Además, entienden que el camino emprendido en Catalunya «puede abrir una puerta para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadorea del resto de pueblos y naciones del Estado, y para conseguir una sociedad más democrática y justo».

En solidaridad con Catalunya, han convocado concentraciones para el jueves 28 de setiembre, ante las delegaciones del Gobierno español en Bilbo, Gasteiz e Iruñea, así como en Alderdi Eder, en Donostia.

La secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, ha defendido la legitimidad de la causa que abanderan las instituciones y la ciudadanía catalana. «Apoyar el referéndum, es apoyar la democracia», ha dicho, añadiendo que no se pueda mantener una posición «ambigua» como la que tienen el Gabinete Urkullu y el PNV.

Aranburu ha elogiado la «valentía» que están mostrando la clase política catalana y las decenas de miles de personas que sostienen una movilización permanente contra el embate represivo del Estado español.

Las centrales denuncian con firmeza la «agresión antidemocrática». «El PP ha impuesto un estado de excepción más cercano a la época franquista que a un sistema democrático, con apoyo del PSOE y Ciudadanos», manifiestan. A este respecto, el secretario de ELA, Txiki Muñoz, ha preguntado al PNV si en la actual coyuntura van a ser capaces de sostener al Gobierno de Mariano Rajoy, después de haberlo hecho aunque está probado el grado de corrupción que hay en las filas del PP.

Muñoz ha acusado a Iñigo Urkullu de rehuir la confrontación democrática con el Estado, recordando que el lehendakari ha dicho públicamente que el Nuevo Estatuto Político de Juan José Ibarretxe no era su proyecto y tampoco el proces.

 ELA, LAB, ESK, Steilas, Etxalde e Hiru les parece «inaceptable la falta de solidaridad del Gobierno Vasco con el pueblo de Catalunya». Entienden que los acuerdos con el Ejecutivo Rajoy «refuerzan al PP y debilitan a las instituciones democráticas de Catalunya», además de ser antisociales. «La sociedad vasca necesita un contrapeso eficaz de modo que la propaganda oficial no tenga vía libre para proclamar, al mismo tiempo, una supuesta solidaridad con Catalunya mientras defiende los acuerdos con el PP», han señalado, pidiendo también al Ejecutivo de Uxue Barkos que tengan «una posición más firme» ante el ataque.