El movimiento vecinal Satorralaia ha llevado a cabo esta mañana una acción informativa en la donostiarra Avenida de Zarautz, en el barrio del Antiguo, para exponer los argumentos por los que se oponen a la construcción de la pasante ferroviaria de Euskotren a través de La Concha.

Satorralaia asegura que «la mayoría de la población se muestra contraria» a esta infraestructura, en primer lugar porque «es una obra innecesaria y sobredimensionada para Donostia», ya que «los metros están concebidos para líneas que transportan 150.000 viajeros al día».
 
Este colectivo entiende que no serviría para reducir el tráfico privado, mientras que sí afectaría negativamente a DBus y Lurraldebus. «Donostia dispone de una red de transporte público relativamente buena y existen soluciones más eficaces y racionales para mejorar la movilidad. El bus es hoy la mejor opción en movilidad urbana y la clave radica en crear pequeños centros de transbordo Topo-DBus para facilitar a los usuarios y usuarias comarcales del Topo acceder a las distintas zonas y lugares de trabajo de la ciudad en autobuses con buenas frecuencias».

En cuanto a la red de EuskoTren, Satorralaia apunta que el desdoblamiento de la vía y una mejora de la integración urbana en zonas como Pasai Antxo o el donostiarra paseo de Errondo «son mucho más interesantes que derrochar 200 millones de euros en la construcción de un metro hasta el Paseo de la Concha». En este sentido, recuerda que en 2013 el Gobierno de Lakua desestimó la idea con el apelativo de «obra faraónica».

En cuanto al trazado, esta plataforma alerta de que su construcción «provocará graves afecciones en el espacio urbano y riesgos considerables para cientos de edificios situados en la proximidad del trazado. La obra se adentra además en un tramo de 300 metros bajo la playa de la Concha. La pasante de Metro no concuerda con una planificación urbana equilibrada, sino que impulsa un modelo centralizador».
 
Por ello, llaman a la ciudadanía a participar este sábado en la manifestación que arrancará a las 17.00 desde la iglesia del Antiguo y que finalizará en Alberdi Eder bajo el lema «Paremos el Metro. ¡Basta de imposiciones!».