El portavoz del Ministerio palestino de Sanidad, Ashraf al Qedra, ha confirmado las muertes de dos manifestantes e informado de que se han producido 60 heridos, todos ellos por munición real, la mayoría con heridas en la parte inferior del cuerpo, dos de los cuales se encuentran en estado crítico.

Ha identificado a uno de los fallecidos como Mahmud al Masri, de 30 años y de la ciudad gazatí de Jan Yunis.

Cientos de jóvenes de Gaza se han dirigido a las fronteras para protestar tras el rezo del mediodía, cuando los altavoces de las mezquitas han instado a la población a tomar las calles y manifestarse contra la decisión de Trump.

En Cisjordania y Jerusalén, según datos de la Media Luna Roja más de dos centenares de personas han tenido que ser atendidas tanto por heridas de balas recauchutadas, por golpes o por haber inhalado gases lacrimógenos.

El jeque Hasan Yousef, líder de Hamas en Cisjordania, ha indicado que  «el Viernes de la Ira es una respuesta a Trump. Marchamos para frenar cualquier violación de la ocupación contra nuestro pueblo y nuestros lugares sagrados».

El miércoles, Trump reconoció a Jerusalén como capital de Israel, los que rompió el consenso internacional y la posición histórica de EEUU al respecto y llevó a los palestinos a rechazar a Washington como mediador en ningún proceso de paz.