El renovado Salón del Automóvil de Barcelona, que ahora se llama Automobile Barcelona, cerró sus puertas el pasado domingo después de diez días en los que las tradicionales presentaciones de modelos estuvieron acompañadas del evento Connected Hub, donde se mostraron los avances en el vehículo conectado y las nuevas formas de negocio que irrumpen en el sector como el coche compartido.

El propósito de Connected Hub –donde participaron firmas tecnológicas como Google, Facebook, Orange, IBM, Ericsson, Oracle o Hewlet Packard– era convertirse en el punto de encuentro de los principales actores en el ámbito del coche conectado y dar respuesta a los retos actuales del sector y a la transformación que está viviendo su industria.

Y es que los datos hablan por sí solos: los vehículos con sistemas de conectividad o vinculados a dispositivos móviles alcanzarán los 50 millones de unidades en el mundo cuando termine 2017, y los expertos prevén que esta cifra aumente hasta los 700 millones en 2022.

Con estas cifras sobre el papel, «el que no cambie, evolucione y vaya por este camino de la automoción y la tecnología, acabará desapareciendo», afirmaba el presidente del certamen, Enrique Lacalle, quien añadió que hace casi un año se empezó a gestar la idea de renovar el salón, porque se notaba cierto cansancio en torno al concepto de los tradicionales salones internacionales del automóvil.

En lo que a nuevos modelos se refiere, uno de los elementos más destacables del salón fue la participación de Tesla, la firma estadounidense puntera en el coche eléctrico y autónomo, que mostró el Model S –un sedán de lujo que cuesta 82.400 euros–, y el Model X, un deportivo todoterreno que supera los 97.000 euros. Anunció que a finales de este mes abrirá su primer punto de venta físico en el Estado español, en el Port Vell de Barcelona.

Otro de los aspectos destacables fue la ausencia del Grupo Volkswagen, líder mundial en ventas, aunque sí asistió su filial Seat, que jugaba en casa y que desveló el nuevo Ibiza, un coche muy importante para el futuro de la compañía y cuyas primeras unidades llegarán en junio, así como el Ateca FR, una nueva variante de enfoque algo más deportivo que permite ampliar la gama del primer modelo del segmento todocamino de Seat.

El grupo Fiat Chrysler Automobiles (FCA) estuvo presente en Barcelona con sus diferentes marcas, entre las que destacaba el Alfa Romeo Stelvio, el primer todocamino de lujo de la marca italiana, que en la serie de lanzamiento First Edition ofrece un equipamiento especial, junto a un propulsor de gasolina de dos litros turboalimentado que proporciona 280 caballos de potencia, asociado al cambio automático de ocho marchas y a la tracción a las cuatro ruedas Q4.

En el stand de Jeep, sin duda el gran protagonista fue el nuevo Compass, el todocamino compacto que acaba de ser renovado y para el que la marca tiene grandes expectativas. Se ofrecerá con un motor gasolina y dos diésel, con potencias que oscilan entre 120 y 170 CV.

En cuanto a la marca Fiat, hizo una gran apuesta por su modelo compacto, el Tipo, disponible con las tres carrocerías, sedán, cinco puertas y familiar, aunque también mostró el 500-60th Anniversary, el 500X en acabado S-Design y anunciaba novedades en el 500L y en el Panda Cross.

También BMW estuvo presente en el Salón de Barcelona, con una fuerte apuesta por el Serie 5, tanto en su variante berlina, que ya está a la venta, o en la familiar Touring.

En cuanto a la marca Mini, también integrada en el grupo alemán, la gran novedad fue el Mini Countryman en su variante híbrida enchufable, que dispone de un motor 1.5 gasolina de 136 CV y otro eléctrico de 88 CV, que le confiere una autonomía eléctrica de 40 kms.

La también británica Land Rover mostraba el Range Rover Velar, el todocamino de lujo intermedio entre el Evoque y el Sport que pudimos ver en Ginebra, al tiempo que Jaguar exponía un amplio abanico de toda su gama con las últimas variantes de sus berlinas XE, XF y XJ, así como el todocamino F-Pace y el deportivo F-Type recién renovado.

Marcas asiáticas. Entre las marcas japonesas, Toyota mostraba los nuevos Yaris y el todocamino C-HR, que solo se ofrece en versión híbrida en el mercado español, al tiempo que su marca de lujo, Lexus, acudía a la capital catalana con su buque insignia, el nuevo LS 500h, y con la nueva versión deportiva del NX 300h (Sport Edition).

Por su parte, Mazda desvelaba en primicia el CX-5, Honda hacía lo propio con los modelos Civic Type R y Civic Sedan, y Mitsubishi participaba en el salón con un renovado ASX y con el Outlander, que ahora dispone de una variante híbrida enchufable PHEV.

Por último, las marcas coreanas también hicieron una fuerte apuesta por Barcelona, consecuencia de su buen posicionamiento en el mercado español. En el caso de Kia, el modelo más llamativo era el Stinger, una berlina de cuatro puertas muy deportiva, aunque también mostró la versión híbrida enchufable del Niro, el siguiente paso hacia la electrificación que planea el grupo coreano.

Hyundai, la otra gran marca coreana, desveló el nuevo i30 Wagon, la variante con carrocería familiar de su modelo compacto, así como el Ioniq, del que ya están a la venta las versiones híbrida y 100% eléctrica, a la que se añadirá pronto la híbrida enchufable que se desvelaba en Barcelona. Esta última monta un motor de gasolina 1.6 GDI con 105 CV combinado con otro eléctrico de 61 CV.