IKER FIDALGO ALDAY
PANORAMIKA

Caminos

Podríamos pensar en la creación artística como un campo de pruebas. Este juego nos permite acercarnos a determinadas situaciones cuyas consecuencias terminan en los límites de la sala. Para artista y público, esta especie de “pacto ficcional” es clave en el encuentro entre obra y mirada. Es por eso que el arte puede enfrentarse a diferentes realidades creando resoluciones de conflictos, pruebas abstractas y dispositivos poéticos que multiplican desde lo perceptivo la experiencia de la vida. Quizás, uno de los potenciales más importantes de la experimentación artística es su capacidad para crear un territorio cuyas fronteras se diluyen y reconstruyen constantemente, permitiendo adecuarse a las necesidades propias de cada visitante. Puede que esta sea la única manera de entender el arte como un camino desde el que hacer frente al mundo que nos rodea.

El Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo, Artium de Gasteiz, nos invita a la primera retrospectiva realizada en el Estado español dedicada a la creadora argentina Liliana Porter (Buenos Aires, 1941). El pasado abril se inauguró como parte del programa de reapertura del centro gasteiztarra tras su parón por obras y el domingo 27 de agosto será la fecha límite para el disfrute de “Liliana Porter. Diálogos y desobediencias”.

Cargada de humor, sarcasmo y sensibilidad, la colección de casi 100 piezas que componen el recorrido, desafían la mirada y la primera lectura, forzándonos a un replanteamiento que disloca la comodidad pasiva para hacernos entrar en otros espectros interpretativos. De una notable multidisciplinariedad, las tres fases en las que se divide la muestra albergan trabajos realizados entre 1969 y 2016 bajo la coordinación comisarial de Estrella de Diego y cuenta con el propio Artium y el CGAC como instituciones productoras.

Hay mucho de juego pero poco de inocencia, como hay muchas preguntas sin respuestas prefijadas, lo que nos permite ser responsables de gran parte de las sensaciones resultantes de nuestra visita. Merece la pena acercarse al trabajo de Porter para valorar su prolífica carrera y su incansable desempeño en la producción de obra.

De nuevo el programa Barriek, destinado a mostrar los trabajos de los y las artistas que han disfrutado de las Becas de Creación Artística de la Diputación Foral de Bizkaia, se hace un hueco en nuestra página cuando el Gabinete Abstracto de la Sala Rekalde los acoge en su programación. En este caso, Andrew Gangoiti Robinson (Australia, 1961) nos presenta hasta el 3 de septiembre su instalación “14 Diddley Bows for Bilbao”. Una instalación con una gran presencia de la arquitectura y la ingeniería cuyo diseño, especialmente realizado para la sala, necesitará de nuestra implicación para su puesta en funcionamiento. Elementos sonoros que necesitan ser tocados, conviven con una sugerente escenografía a base de cables y péndulos que cuelgan del techo. Todo el compendio es, finalmente, una experiencia sensorial en la que nuestro propio cuerpo se erige como protagonista imprescindible.