Raimundo Fitero
DE REOJO

Disfunción

Seguimos recibiendo sobresaltos sobre la catástrofe del avión estrellado en los Alpes. Hoy mandan las palabras, los matices, los indicios, el lenguaje como plataforma para explicar algo que parece camuflado, todavía, bajo demasiados conceptos cerrados, herméticos. Sabiendo que todo irá variando en las próximas horas, parece que se va a comer el marrón el copiloto, al que le acusan de problemas síquicos, enfermedad siquiátrica. Unos le llaman depresión. Otros disfunción. Y buscando en su perfil todas aquellas lagunas, los resquicios por los que meter una especulación, una hipótesis, una teoría, una concepción ideológica de lo que significa enfermedad mental. Un asunto bastante importante que se debe reconducir en todos sus conceptos y lenguajes.

Nos aturde lo que vamos conociendo, pero la vida sigue. Y sigue de la peor manera. Se siguen deteniendo con total impunidad a quienes ejercen el derecho de todo individuo como es tener defensa. Un ritual de mantenimiento de las misma claves electorales de la derecha española y sus palmeros. Se expulsa del parlamento a quienes protestan por el abuso de autoridad y de paso se impide que conteste el señor Urkullu a las preguntas más peliagudas. Una disfunción. En Madrid se aprueban las leyes más reaccionarias y totalitarias de las últimas décadas, que pondrán mordazas, e instaurará el estado policial de manera general. Como estrambote de todo lo que sigue sucediendo, en el tongo televisivo, gana Belén Esteban. Nunca se había visto algo más escandaloso. Cierto es que el personal anda preparando sus vacaciones de semana santa. El avión es un transporte muy utilizado en estos días. ¿Se resistirá por lo de los Alpes? ¿Se podrá alguna vez hablar en serio de lo que son medidas de seguridad en los aeropuertos y los vuelos?