Mikel INSAUSTI
CRÍTICA «Home»

Divertida parodia infantil de la ciencia-ficción distópica

En el estudio DreamWorks Animation siguen apostando por el humor como medio para enganchar al público menor, aunque sus producciones descuidan otros aspectos artísticos, sobre todo la banda sonora, y así en “Home” las canciones horteras que Rihanna plagia de otros artistas se le pueden atragantar a los acompañantes adultos.

Todo lo contrario hay que decir de los apartados técnicos, cuidados al máximo dentro de una gran producción animada que ha costado la friolera de 132 millones de dólares. El nuevo sofware creado por la compañía, y que ha sido bautizado con el nombre de Premo, arroja unos resultados impresionantes en todo lo relativo a las expresiones faciales, lo que viene muy bien para los personajes humanos, como el de la preadolescente Tip que interactúa con el extraterrestre Oh con total naturalidad. Y si su cara parece real, igual sucede con cada uno de los ricitos de su cabellera en movimiento.

No menos destacables son los efectos especiales diseñados por Eric Michael Miller, que podrían servir perfectamente para una película de ciencia-ficción de las serias. La especie alienígena Boov a la cual pertenece el protagónico Oh responde a la pura caricatura, pero las naves de combate procedentes del planeta que les persigue por toda la galaxia parecen salidas de la imaginación de un Syd Mead y el universo “Alien”, aunque al final la criatura que se oculta bajo semejante parafernalia invasora recuerde a una estrella de mar tan inofensiva como cualquier personaje de la serie “Bob Esponja”.

Tales embromados contrastes surgen de la adaptación de un cuento de Adam Rex, que acaba siendo una parodia infantil de la narrativa futurista distópica. El malvado Smek es muy gracioso, lo mismo que su plan para transportar a los habitantes de la tierra a un campo de concentración con aspecto de parque de atracciones.