José Luis Bilbao mostró ayer su perfil más visceral, y todo porque la primera fuerza de la oposición le interpeló para que aclarase las informaciones publi- cadas por GARA sobre los poderes que mantuvo el diputado foral de Hacienda y Finanzas, José María Iruarrizaga Artaraz, en varias empresas constructoras y del sector sociosanitario que EH Bildu asocia a intereses del PNV. Para el diputado general que la coalición demande explicaciones es una «canallada».

La última comisión de las Juntas Generales de Bizkaia fue el lugar donde Bilbao desplegó toda su retahíla de tópicos para tratar de desprestigiar la labor de control y fiscalización de la coalición. Tampoco se salvó este diario, al que el dirigente jeltzale denominó como «boletín oficial de la izquierda abertzale», aunque lo cierto es que las informaciones no fueron desmentidas por el diputado general, que tampoco dijo por qué retiró una inserción publicitaria en GARA después de que diese a conocer que Iruarrizaga compaginó sus poderes en empresas del grupo Urazca con su responsabilidad en el Gobierno foral.

Ayer, se supo que el diputado de Hacienda y Finanzas efectuó labores de «auditoria interna» en varias de las firmas de la constructora, que abandonó tras el fallecimiento de su presidente, Javier Uria, y de que recibiese la oferta de Bilbao. Para el diputado general, Iruarrizaga era un «trabajador por cuenta ajena» al que Urazca e Igurco Gestión otorgaron poderes para realizar su tarea y, sostuvo, esos poderes quedaron «vacíos» una vez que abandonó las compañías. No era necesario que él actuase para que se revocaran y, además, trató de justificar el retraso en el caso de Urazca –estuvo seis meses– por la demora en la tramitación de los cambios en la estructura de las sociedades tras la muerte de Uria.

«José María Iruarrizaga desde julio de 2003 no ha ejercido ninguna actividad ni ha recibido más ingresos que los procedentes de la Diputacion, tal y como se puede comprobar en la vida laboral detallada de la Seguridad Social», añadió José Luis Bilbao, después de haber manifestado que EH Bildu eran unos «canallas y carroñeros» por manchar la imagen pública del único diputado que le ha acompañado en todos sus gobiernos durante doce años, del que destacó su «honradez» en su trabajo.

«Han pinchado en hueso –repitió el jeltzale, muy molesto–. Han construido un discurso carroñero en base a mentiras y pretenden que el diputado demuestre su inocencia cuando es al revés; quien acusa debe exhibir las pruebas». A esa máxima se sumaron los portavoces del PP y PSE, a quien luego Bilbao se lo agradeció por su «honradez intelectual». Como lo hizo en el último pleno en Gernika, Bilbao arremetió contra el equipo de asesores de EH Bildu, a los que viene definiendo como «su Stasi particular».

Jesús Isasi (PP) comentó que «no se puede desprestigiar ni a los políticos ni a las personas de esta manera», mientras Iñaki Egaña (PSE) acusó a EH Bildu de «extender mantos de sospecha sin ningún rigor». En el mismo tono agresivo que el diputado general, la portavoz de su partido, Lorea Bilbao, acusó a la coalición de «mentir y ensuciar» buscando «un interés mediático y partidista».

EH Bildu insiste en que la Diputación favoreció a Urazca

Tras escuchar las explicaciones de José Luis Bilbao y soportar las descalificaciones a su labor fiscalizadora, EH Bildu insistió en que la Diputación vizcaina favoreció a Urazca e Igurco, empresas para las que trabajó José María Iruarrizaga antes de ser nombrado responsable de Hacienda y Finanzas. En el segundo turno, su portavoz, Irune Soto desveló que la institución foral realizó un informe favorable a la constructora y lo presentó en el concurso de acreedores de la empresa, con el objetivo de facilitar la quita de la deuda que mantenía con terceros.

Soto, a quien no convencieron las explicaciones dadas por Bilbao, dijo que habían sido «insuficientes» y repitió en varias ocasiones que ponía en duda que ser apoderado de empresas privadas pueda ser compatible con el cargo de diputado.

Tan bronca fue la comparecencia que al finalizar, cuando el juntero soberanista Asier Vega había comenzado a defender su siguiente iniciativa, Bilbao e Iruarrizaga se acercaron a saludar uno a uno a cada uno de los apoderados presentes dándoles la mano, a excepción de a los de EH Bildu, lo que motivó que el juntero Joseba Gezuraga, llamase al diputado general «maleducado». Inicialmente el presidente de la comisión expulsó al soberanista, pero ante sus protestas, suspendió la sesión, que se reanudó unos minutos después con Gezuraga. A.G.