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Republicanos y unionistas, a la caza del escaño más disputado

Republicanos y unionistas vuelven a luchar en el norte de Irlanda por un escaño en la circunscripción más reñida de las elecciones generales de Gran Bretaña, donde hace cinco años un solo voto dio el triunfo al Sinn Féin. Se trata del distrito de Fermanagh-South Tyrone.

En dicha circunscripción, que comprende el condado de Fermanagh y el sur del de Tyrone, ganó un asiento en el Parlamento británico en 1981 el preso y candidato del Sinn Féin Bobby Sands. Nunca llegó a viajar a Westminster porque murió, poco después de su histórica victoria electoral, en la cárcel de Maze por una huelga de hambre organizada para pedir al Gobierno de Thatcher el estatus de prisioneros políticos.

«Aún no hay encuestas, pero va a estar otra vez muy, muy reñido», aseguró la parlamentaria del Sinn Féin Michelle Gildernew, quien aspira a derrotar en esta circunscripción al candidato del Partido Unionista del Ulster (UUP), Tom Elliott, y renovar por cuarta legislatura consecutiva su asiento en Londres. «Aunque hay otros tres candidatos, Elliott cuenta con el apoyo de todas las fuerzas del unionismo aquí y en Gran Bretaña, por lo que no subestimamos la magnitud del reto al que nos enfrentamos», afirmó la republicana sobre el pacto firmado por el UUP, tercera formación norirlandesa, y el mayoritario Partido Democrático Unionista (DUP).

El acuerdo entre las formaciones unionistas para presentar un candidato conjunto funciona en cuatro de las 18 circunscripciones norirlandesas, entre ellas las de Fermanagh-South Tyrone, y su objetivo es frenar el ascenso del Sinn Féin, segunda formación de los Seis Condados y principal representante de la comunidad republicana.