GARA
BRUSELAS

La UE pone el foco en una operación militar en el Mediterráneo

La UE estudiará mañana el decálogo de medidas con las que quiere frenar la inmigración en el Mediterráneo, tras las más de 800 muertes del naufragio del pasado fin de semana. Entre ellas, destaca una misión militar que seguiría el modelo de la operación contra la piratería y se encargaría de destruir las embarcaciones que utilizan los migrantes. Las organizaciones humanitarias, en cambio, reclaman que la prioridad sea salvar vidas humanas y el asilo.

La Unión Europea analizará mañana los diez puntos que plantea para frenar las muertes de inmigrantes en el Mediterráneo en una cumbre extraordinaria ante la que surgen las dudas sobre la eficacia a largo plazo de estas medidas. De momento, ha puesto el foco en la actuación sobre las «mafias» y traficantes de personas, a través incluso de la acción militar.

En cambio, para las organizaciones de ayuda a los migrantes, como la Cruz Roja italiana, es necesario poner el aspecto humanitario en el centro del debate. Porque «se puede cerrar una ruta, incluida la de Libia, pero se abrirá otra», explicó su presidente, Francesco Rocca.

La comunidad católica Sant Egidio propuso tratar las demandas de los refugiados en el lugar de origen, creando «oficinas humanitarias» que les ayuden a obtener visados.

El Alto Comisionado de la ONU para los refugiados, Acnur, aplaudió varios de los puntos recogidos en el decálogo que estudia la UE, pero advirtió de que la prioridad debe seguir siendo salvar vidas humanas. «El mal está en el detalle. Necesitamos asegurarnos de que el componente del asilo y el componente de la protección de las personas es priorizado en estas medidas», defendió Voker Turk, responsable de la agencia.

Pero los líderes europeos parecen haber puesto el foco en otro tipo de medidas y mañana discutirán la misión militar para capturar y destruir los barcos que utilizan los traficantes de inmigrantes, siguiendo el modelo de la operación Atalanta contra la piratería.

Los estados miembros ya han dado el apoyo político preliminar a la operación. También ha recibido el apoyo político el refuerzo de la misión de la agencia de control de fronteras Frontex, con más presupuesto, barcos y aviones, y la ampliación de su ámbito de actuación. El primer ministro australiano, Tony Abbott, aconsejó a la UE que siga el ejemplo de su país, que obvia consideraciones humanitarias, y rechace todas las embarcaciones de migrantes. Los buques de la Marina australiana interceptan los barcos con migrantes y los envían de vuelta a su punto de tránsito, en general Indonesia. Asimismo, los demandantes de asilo son trasladados a centros de retención en la isla de Manus, en Papúa-Nueva Guinea, o en la isla de Nauru, en el Pacífico, y en ningún caso obtienen permiso para instalarse en el país.

Inculpados dos de los tripulantes por el naufragio

El balance de víctimas del naufragio del domingo se estima en 800 personas, según Acnur y la Organización Internacional para las Migraciones, «lo que convierte a este en el incidente más mortífero en el Mediterráneo que hayamos registrado nunca». La Fiscalía no confirmó cifras pero estima que en el pesquero, de 20 metros de eslora, navegaban unas 850 personas. Oficialmente reconoció 24 muertos y 28 supervivientes. Estos llegaron ayer a Catania «exhaustos, frágiles y asombrados de ver a tantas personas esperándoles», explicó Acnur.

Y dos de ellos fueron inculpados por el accidente. Los fiscales italianos dictaron prisión preventiva contra el supuesto capitán, un tunecino de 27 años, y un tripulante sirio de 25. Al primero se le imputan delitos de naufragio culposo, homicidio culposo múltiple y favorecer la inmigración clandestina, mientras que al segundo se le acusa solo de favorecer la inmigración clandestina. Si hasta ahora se atribuía el naufragio al hecho de que todos los inmigrantes se agolparon en uno de los lados del barco ante la llegada de un mercante portugués a su rescate, ahora se apunta también a que el capitán podría haber hecho colisionar el barco con el mercante. Y el flujo de migrantes no cesó ayer. La Marina italiana afirmó haber salvado a 446 en otro pesquero que comenzaba a hundirse. Solo el lunes el número de rescatados ascendió a 638. GARA