I.B.
GASTEIZ

Ejercicios militares en Garoña para «comprobar que todo funciona»

Unos 65 militares españoles, junto a personal de Nuclenor, van a participar hoy en un simulacro de emergencia en Garoña para comprobar que «todo funciona» en la central. Estos ejercicios contradicen la versión oficial de que el riesgo de accidente nuclear es inexistente.

Si hay un argumento que quienes se muestran a favor de la energía nuclear y, más concretamente, de la reapertura de la central de Garoña repiten insistentemente es que la posibilidad de que se produzca un accidente del calibre del de Chernó- bil o recientemente el de Fukushima es prácticamente inexistente. Es como un mantra que el lobby pronuclear y las empresas adjudicatarias de la central atómica ejecutan cada vez que tienen opción. No hay riesgo.

Pero alguno sí que habrá para que varias docenas de efectivos de la Unidad Miltar de Emergencias (UME) vayan a participar hoy en un ejercicio práctico en la central burgalesa junto a personal de Nuclenor. Según informó ayer “Diario de Burgos”, el ejercicio consistirá en simular una emergencia en el interior de la central para, según fuentes militares, «comprobar que todo funciona». No especifican si informarán a la opinión pública en caso de que no lo haga.

El citado diario indica que el ejercicio responde a un convenio firmado por la Asociación Española de la Industria Eléctrica y la UME, con la intermediación del Consejo de Seguridad Nuclear, y añade que «si surgiera un accidente de máxima gravedad y todos los medios existentes en la planta fueran insuficientes, actuarían los equipos de la UME». Ergo, el riesgo, existir existe.

En la información se señala asimismo que la capacidad técnica de la UME «les permite hacer frente a la descontaminación nuclear de hasta 400 personas por hora» y que dispone de tecnología similar a la que Estados Unidos utilizó para «mapear» la nube radioactiva de Fukushima. Un comentario que puede ser cualquier cosa menos tranquilizador.

Aunque los trabajos de hoy se centrarán en el interior de la central, en los últimos días los militares han hecho ejercicios en el exterior, entre otras cosas, para «saber cómo actuar ante un posible corte de las comunicaciones por tierra».