GARA
LA HABANA

Las FARC-EP suspenden la tregua por la muerte de 26 guerrilleros

Las FARC-EP anunciaron ayer la suspensión de la tregua unilateral que decretaron en diciembre tras la muerte de 26 guerrilleros en un bombardeo. Los hechos ocurrieron el jueves en el departamento del Cauca. «Contra nuestra voluntad tenemos que proseguir el diálogo en medio de la confrontación», señalaron en un comunicado. El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, presentó el operativo como «una acción legítima del Estado».

Las FARC-EP suspendieron la tregua unilateral que entró en vigor el 20 de diciembre en respuesta a la muerte de 26 guerrilleros en un bombardeo en una zona rural del municipio de Guapi, en el departamento del Cauca. El ataque estaba dirigido contra un campamento del Frente 29 de la guerrilla.

«Contra nuestra voluntad tenemos que proseguir el diálogo en medio de la confrontación. Aunque Santos anuncia que mantendrá la ofensiva, insistiremos en la necesidad de acordar cuanto antes, para la salud del proceso de paz y evitar nuevas victimizaciones, el cese bilateral de fuegos. Nos duele por igual las muertes de guerrilleros y soldados, hijos de un mismo pueblo y procedentes de familias pobres. Debemos parar este desangre», resaltó en un comunicado el Secretariado del Estado Mayor Central de las FARC.

«Duele la muerte de 10 soldados combatiendo y también la de 26 insurgentes sin poder combatir desmembrados con bombas de 250 kilos. Es un acto aleve y degradante. Tregua unilateral no es insostenible, se hace imposible. 18 asesinados de la confraternidad insurgente hieren el corazón y alarman la razón», respondió en su cuenta de Twitter el delegado en la mesa de conversaciones Pastor Alape antes de que la guerrilla anunciase el fin de la tregua.

«La paz es el único camino contra la barbarie. No más muertes sin razón. Lo inteligente es la inteligencia de la paz», destacó en otro mensaje.

En una declaración hecha en la sede de la Presidencia acompañado por el ministro saliente de Defensa, Juan Carlos Pinzón –sustituido por Luis Carlos Villegas–, y el mando militar, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, que el 15 de abril ordenó reiniciar los bombardeos tras la muerte de 10 soldados en el Cauca, advirtió de que los operativos «no se detendrán».

Recordó que fue «claro» al advertir de que «las operaciones no se detendrían y no se detendrán. Que nadie se llame a engaños». Felicitó al alto mando militar por el bombardeo del jueves, que definió como «un trabajo de entrega y valentía». «Ha sido una acción legítima del Estado en defensa y protección de la ciudadanía», añadió.

Defendió que la operación representa «un golpe contra el narcotráfico, la minería ilegal y la extorsión», ya que acusó al Frente 29 de ser «el principal responsable de esas actividades criminales en la región».

 

Un alto el fuego en peligro prácticamente desde su inicio

El 20 de diciembre entró en vigor el alto el fuego unilateral e indefinido de las FARC. El 31 de diciembre, la delegación de la guerrilla en La Habana emitió «una alerta temprana» sobre «provocadores movimientos de despliegue de tropas que solo buscan generar confrontación y luego acusar a las FARC-EP de violar el cese al fuego». A principios de febrero de este año, la delegada Alexandra Nariño ratificó la vigencia de la tregua tras la visita de una representación del Frente Amplio, encargado de verificar el alto el fuego.

«Al valorar el gesto humanitario de nuestra decisión, nos fue solicitado mantener el cese al fuego indefinido. Atendiendo esa solicitud, tomamos la decisión de mantenerlo», anunció en un comunicado leído ante los medios no sin antes denunciar la muerte desde diciembre de 14 guerrilleros y la captura de otros 9. Incluso el propio Santos, quien durante algo más de un mes suspendió los bombardeos, reconoció que las FARC habían cumplido con la tregua.GARA