Arnaitz GORRITI
Laboral Kutxa Baskonia

Forzado al segundo partido

Sin tino, sin rebote y con Causeur y San Emeterio frenados, los gasteiztarras se rinden a un peleón Unicaja.

UNICAJA 69

LABORAL KUTXA 55


Laboral Kutxa Baskonia fuerza el segundo partido de su serie ante Unicaja... Mejor dicho, llega forzado al segundo partido, con el agua al cuello, porque sucumbió ante un Unicaja que en ataque estuvo bien lejos de la brillantez, pero que asfixió con su defensa a los de Ibon Navarro.

Con 9 tantos y 13 rebotes, Vladimir Golubovic fue el jugador más destacado del partido, y Carlos Suárez fue el segundo mejor. Poca sutileza en el cuadro malacitano, que se permitió perder por 8-20 el último cuarto, ya que al final del tercero ganaba por 61-35, nada menos.

Mal arranque, para variar

Que los gasteiztarras arrancaran mal fuera de casa no constituía ninguna novedad, de forma Ibon Navarro pidió su primer tiempo muerto con un 9-2 adverso. Golubovic se hacía el amo del rebote en la pintura mientras que Ryan Toolson hacía sangre gracias a la calentura de su muñeca, algo inhabitual en los partidos entre andaluces y baskonistas esta campaña. No era cuestión de perder la paciencia, pero sí de espabilar, algo que se vio de forma clara cuando la defensa baskonista permitió a Kuzminskas acabar una penetración por el medio de la zona con un matazo.

Por fortuna, la entrada de Hopson y Shengelia dio mayor seriedad defensiva y garra reboteadora a los de Ibon Navarro, mientras que el acierto en Unicaja brillaba por su ausencia, en especial un Granger que notaba su inactividad. Eso sí, cinco puntos seguidos de Suárez cerraban el primer cuarto 18-11, después de sumar una de sus 17 posesiones pérdidas.

El primer triple gasteiztarra entraba en el décimo intento, obra de Mike James. El desacierto fue una gran cruz de los de Ibon Navarro, que además veían cómo Golubovic, afectado por el «síndrome del exjugador converso», se erigía en un «Carpanta» que rebañaba cada balón que escupía el aro. Joan Plaza además sacaba brillo de un Granger que de a poco las iba metiendo, e incluso un Gabriel que le dio un clínic de entendimiento de juego a Shengelia.

Con todo y eso, el Baskonia aguantaba por debajo de la decena al filo del descanso... si no fuera por el triplazo que clavó Markovic desde 8 metros: 39-26 y las alarmas encendidas.

Jugando a jugar

San Emeterio y Causeur, excelentemente defendidos, apenas si asomaban por el Martín Carpena. Sus compañeros, erráticos en el tiro y sin poder hacer fluir el juego colectivo, los echaban de menos, mientras que Unicaja, con un prcial de 7-0, se iba 46-26 con otro triple de Suárez.

Ni los tiempos muertos de Navarro frenaron una debacle que terminó con el tercer cuarto 61-35, tras un parcial de 22-9. Unicaja lo vio tan ganado, que se permitió pasar medio último cuarto con solo dos puntos anotados, mientras el Baskonia maquillaba sus números con Tillie –de lo mejor anoche– y Mike James. Ni con el 66-55 se inquietó gran cosa el cuadro malagueño; si acaso por el golpe que recibió Markovic en la rodilla. Los de Plaza fuerzan a Laboral Kutxa Baskonia a que el segundo partido ya suponga un cara o cruz.

«Da igual perder de uno o de 20; hay que volver el lunes»

No estaba para bromas, Ibon Navarro y se mostró muy enojado tanto por el partido como por alguna pregunta. «De cara al sábado –por mañana–, da igual perder de uno o de 20. Lo que hay que hacer es volver aquí el lunes», afirmaba.

«Lo que no podemos hacer es fustigarnos por la derrota. Esto se ha acabado. Tenemos que ‘limpiarnos la cabeza», analizar lo que hemos hecho bien y mal y ganar el siguiente partido», remachó, molesto porque las claves que remarcó, el control del rebote y el acierto, fueron del todo de su adversario.A. G.