Iñaki Sáez fue el técnico que consiguió el último ascenso del Bilbao Athletic a Segunda A, con jugadores como Txirri, Garitano, Uribarrena, Agirretxu, Julen del Val, Eskurza, el propio Josu Urrutia o Galdames, Moska, Somavilla, Merino, Goio, Gamboa, Justo Ruiz, Eleder, Mendiola o Lobato. Era la temporada 1988-89. Han transcurrido nada menos que 26 años y el filial rojiblanco está en puertas de volver a reeditar un nuevo ascenso.

A las 12.00 (ETB2), desde la ‘Tacita de Plata’, ante un Cádiz enrabietado y que quiere tirar de testiculina, los cachorros están ante el partido de su carrera. El partido soñado que decía en la previa Cuco Ziganda. Y por soñar, sueñan, como desveló el técnico, con un gol tempranero. «Tenemos que hacer gol para el minuto diez, dicen los chavales. Pero ellos también lo dirán... Sobre la pizarra sale todo...», hablaba el de Larrainzar. Al menos, de su parte está que en casi todos sus partidos esta temporada, incluidos playoffs, han marcado al menos un gol...

Los rojiblancos se ejercitaron ayer a la misma hora del partido pero en Jerez. Todos están disponibles y hasta parece que Jurgi Oteo se ha recuperado de sus molestias. Entrenamiento intenso y recuperación a la espera de la cita de hoy. La renta con la que saltarán al Ramón de Carranza es buena, 2-0, y frente a ella, los amarillos tirarán de todas sus armas. «Personalidad, arriesgar, no tener miedos y sí jerarquía», sostenía el técnico Claudio Barragán. «Creo que todo eso lo tiene el equipo y tiene que salir el domingo», añadía.

Arenas y Gernika, en la gloria

Y en tanto el Bilbao Athletic puede ser hoy equipo de Segunda A, el que también hizo ayer historia es el no menos histórico Arenas de Getxo, que 35 años más tarde y con el exleón Jon Pérez Bolo en el banquillo vuelve a esta categoría en la que puede haber récord de equipos vizcainos y es que también este sábado, doce años después, hizo lo propio el Gernika y hoy puede seguir su estela el Portugalete. Hasta ocho conjuntos de Bizkaia podrían militar en la categoría –si no ascendiera el Bilbao Athletic–. Y de rebote, el Getxo se ha visto favorecido y sube a Tercera, igual que el Aretxabaleta guipuzcoano.

El Arenas, por cierto, el primer equipo al que dirigió un entrenador de nombre Javier Clemente allá en la campaña 75-76, se traía un valioso 0-1 de Logroño y ayer en Gobela, con un hombre menos desde el minuto 35, sentenció con un 4-2 al Logroñés, tres de ellos obra de un inspiradísimo Jokin Aranbarri. Merecido lo del club arenero, que tras el Murcia es el equipo que más temporadas ha estado en Tercera División. Fundador de la Primera División, campeón de Copa en 1919, un histórico que ve recompensada su insistencia.

También cumplió el Gernika de Jabi Luaces, que venía con un 0-1 ante Osasuna Promesas, y en un agónico final, el 1-1 de ayer en Urbieta les valió para refrendar el ascenso. Ahora es el turno del Portugalete, que con 9 intentos es el club de todo el Estado que más veces ha entrado en playoff de Segunda B. Los jarrilleros se traen un empate a cero de su visita al Cayón y tienen la oportunidad de rubricar una campaña histórica para el balompié vizcaino (18.00). Todas las miradas puestas en La Florida... y en el Ramón de Carranza.

De «alto riesgo» y no por el calor

El partido de hoy entre el Cádiz y el Bilbao Athletic ha sido declarado de ‘alto riesgo’, y no, no tiene nada que ver con los cerca de 40 grados que se esperan a mediodía en la ciudad andaluza. A nadie parece importarle eso. El 19 de agosto de 1982, Cádiz capital registró 43, la temperatura oficial más alta allí desde 1920, según la Agencia Estatal de Meteorología. Para este fin de semana se esperaban 38 de máxima. Hace unos meses, al hilo del Mundial de Qatar, el presidente de la UEFA, Michel Platini, dijo aquello de que «con más de 40 grados es imposible jugar al fútbol y para los aficionados también sería insoportable». Claro, 40 no son 38. Lo que sí es una evidencia médica es que si la temperatura exterior pasa la barrera de los 39-40º C, el cerebro le ordena a los músculos que bajen el ritmo y es cuando se produce la fatiga. Si hay que ir se va, si hay que jugar se juega, y si a alguien le sucede algo, ya habrá tiempo de llevarse las manos a la cabeza.J.V.