Joseba VIVANCO
Athletic

¿Cómo están ustedes?

«Esperemos que el Barcelona no se lo lleve», ironiza Valverde sobre Aduriz, que coronó la superioridad rojiblanca con una tripleta.

RAYO VALLECANO 0

ATHLETIC 3

 

Sí, ya sabemos que es lunes, pero ¿cómo están ustedes....? No respondan... Tan solo sigan despiertos, porque esto no es un sueño. El borrón de Granada, decíamos hace una semana, no empaña nada de lo hecho y ayer los hombres de Ernesto Valverde demostraron que era cierto, que solo fue un tropiezo y que van en serio. ¿Hacia dónde? Ahora sí, soñemos. Porque este Athletic de los ‘vascos, navarros y un francés’ dio en un campo, es verdad, tradicionalmente propicio como Vallecas, toda una lección de fortaleza, de fe, de solidaridad, de esfuerzo, llevados en volandas por la numerosa parroquia rojiblanca que se citó, como siempre, en el estadio madrileño para arropar a los suyos. Y estos se lo devolvieron con creces. Con una victoria contundente, con un puñetazo sobre la mesa para no descolgarse de los puestos nobles de la tabla, rubricado por la actuación estelar, una vez más, de Aritz Aduriz. ¿Qué decir del delantero donostiarra? «Para nosotros es una joya», reconoció su entrenador luego. Y añadió con su habitual ironía: «Esperemos que el Barcelona no se lo lleve».

Los epítetos se agotan. «Mis compañeros me lo ponen muy fácil», respondía después el aludido a los elogios. Y no le falta razón, la actuación global de los pupilos de Txingurri fue sobresaliente, asfixiando al Rayo desde el minuto uno y mostrando de nuevo máxima efectividad arriba. Solo tras la injusta expulsión de Laporte –ni que le hubiera mirado un tuerto–, ya con el 0-3 en el marcador, concedió a los franjirojos algunos amagos de ocasión. Al final, una victoria que reafirma el camino a seguir.

Los rojiblancos presentaban sus credenciales en Vallecas, de nuevo con esa camiseta negra y pantalón rojo que tanta suerte les da, con un par de novedades en el once: Lekue por delante de Balenziaga en lugar de Susaeta, e Iturraspe acompañando a Beñat y de paso dar descanso a San José. Y el partido se puso se cara antes del primer minuto.

Decía César Luis Menotti que «el contragolpe es como el amor, se encuentra. No puedes planificarlo. Surge, no se prevé». Y así fue. Falta que saca el Rayo al área bilbaina, despeje, pelota que llega a Beñat que de manera telepática prolonga en largo hacia un Aduriz que sorprende a la deshilachada zaga rayista, salva la salida del guardameta y coloca suave con la zurda al fondo de la red. El del Antiguo seguía con su idilio con el gol. Iba a ser el primero de los tres tantos que firmaría en una tarde épica para él. Anotaría con la diestra con suavidad, pasados los veinte minutos desde los once metros, y sentenciaría ya en la segunda parte de cabeza. La tripleta perfecta. El primero en hacerlo esta temporada.

El Athletic cobraba ventaja a los 54 segundos de juego. Y si algo aprendió el jueves en Augsburg es que la mejor defensa es un buen ataque. Lejos de caer en la tentación de retroceder un paso, jugó sin mirar al marcador. Una presión alta, exigente, maniató a un conjunto rayista que solo acertó a amedrentar en un remate de Pablo Hernández que Iraizoz sacó con un pie. Por lo demás, los leones ahogaban la salida del balón local y maniataban su medular, aprovechando para robar y salir con rapidez arriba. Pero iba a ser en una jugada a balón parado la que pondría en bandeja el segundo. Agarrón en el área sobre un incisivo Raúl García y el colegiado que sanciona una acción que se repite en cada balón parado al área, en cada partido. A Aduriz no le tembló el pie.

Los de Paco Jémez, sorprendidos con la presión y consistencia rojiblanca, ni sabían ni podían. Un auténtico calvario para los vallecanos que daban la sensación de clamar la hora para recomponer el desaguisado en el vestuario. Raúl García era un verdadero quebradero de cabeza arriba, en tanto en la zaga, el eje Etxeita-Laporte se bastaba. Con el resultado franco tomaron camino del descanso, que Jémez aprovechó para tratar de resetear e introdujo dos cambios en el once y ordenó una línea de tres atrás. Ni así, oigan.

La sentencia al encuentro no iba a tardar en llegar. Antes, Raúl García, otra vez de notable, mandó un balón al palo tras una asistencia de Beñat. Preludio de la enésima falta sacada por el de Igorre, Manucho que no puede evitar prolongar la pelota al segundo poste, Laporte cabecea al contrario y allí aparece el del idilio con el gol para hacer el tercero. Vallecas era rojiblanca, sí, pero del Athletic. Inevitable el ¡Y Llorente qué!, los cánticos para el goleador, el ¡Athletic gu gara! y como colofón el ‘Txoria, txori’, que lleva camino de convertirse lejos de San Mamés en seña de identidad. Sostenía Aduriz al final del choque que por el ambiente «parecía San Mamés»... mejor.

Con todo encarrilado, solo la expulsión de Laporte por obra y gracia de Hernández Hernández trastocó los planes de Valverde y los suyos. El de Agen –que sí, que es francés y sin apellidos vascos– tomó camino de la ducha, San José entró para ejercer de central, Bóveda al carril diestro, luego Elustondo para que Iturraspe recuperara fuelle, y con esos retoques y la generosidad de Lekue, Raúl García, De Marcos y demás, se sostuvo la portería a cero gracias a la nula puntería de algunos remates locales y también al paradón de Iraizoz sobre la bocina a cabezazo de Javi Guerra. Que la grada rojiblanca coreara el nombre del navarro da idea de lo mucho que los seguidores bilbainos estaban entregados con su equipo. ¿Cómo están ustedes?

Volver a la buena dinámica

Al final del choque, jugadores y seguidores exteriorizaban su satisfacción por lo logrado. Valverde hablaba de lo complicado que a priori era el partido por el rival. «Se nos puso de cara desde el principio, pero a partir de ahí estuvimos bien, apretamos y tuvimos opciones. Después de la expulsión de Laporte, que creo que ni hace falta, se nos echaron encima y sufrimos por la banda izquierda, con Balenziaga fastidiado por el partido del jueves». Pero todo se quedó ahí. «Este triunfo nos vuelve a conectar en la buena dinámica», avanzó un Txingurri que espera «la aprovechemos hasta final de año».

El Athletic ha reconducido su trayectoria liguera tras el tropiezo granadino, las dosificaciones funcionan, ahora llega el trámite copero y luego un Málaga propiciatorio para seguir sumando. Así que si es athleticzale, sonría... es lunes.

 

Aritz Aduriz, 34 años y 291 días... permítanle que insista

‘Aduriz’ era trending topic en Twitter tras su tripleta en Vallecas. Su séptima desde que en 2002 iniciara su carrera profesional, el cuarto con el Athletic, el segundo esta temporada tras la ida de la Supercopa ante el Barça. 34 años y 291 días. El jugador más veterano en hacer tres dianas fuera de casa en Liga ¡desde Puskas en 1963! Y no deja de hacer historia. Venía de hacer dos dianas en Europa y colocarse como máximo anotador de la competición. Al segundo 54 se sacaba otro gol de la chistera. En la grada, le observaba un tal Fran Yeste. El de Basauri fue el último león en marcar en el primer minuto en un partido oficial, el 19 de diciembre de 2009 a Osasuna en San Mamés. El gol más rápido que firmaba el Athletic fuera de casa desde aquel que hiciera Patxi Salinas en el viejo Atotxa un 4 de enero de 1987. Y por descontado, el más rápido en lo que llevamos de Liga.

Y al primero llegó un segundo y un tercero –con la testa, y así iguala de nuevo con Llorente como tercer máximo cabeceador de los últimos 25 años, con 42 tantos–, alcanzando la cifra de 20 goles esta temporada, el primer futbolista estatal que llega a este dígito en diciembre en lo que vamos de siglo XXI. Pero es que desde Fidel Uriarte en 1967 ningún rojiblanco había hecho 10 tantos en las primeras trece jornadas. Así que los registros comparativos se agotan. Porque Aduriz –el Athletic no dudó en tuitear «yo vi jugar a Aduriz» como homenaje al donostiarra– alcanza los 105 goles con la camiseta zurigorri, con lo que supera los 103 del ‘Gallo’ Etxeberria y ya es el 18º máximo artillero de la historia del club. No hay palabras. 20 goles este curso; 26 fue su récord el anterior. Y a todo esto... ¿y Del Bosque qué, y Del Boque qué?J.V.

 

El último 0-3 en Vallecas y billete a la Champions

La última vez que el Athletic ganó 0-3 fue también en Vallecas, en mayo de 2014, en un día inolvidable para los rojiblancos y su afición porque fue la victoria que dio el pase a la Champions a los hombres de Valverde.

 

Balenziaga llega a los cien partidos como rojiblanco

Mikel Balenziaga (27 años) es el 121º jugador que disputa cien partidos de Liga con el Athletic y el 19º guipuzcoano que lo logra. No suma ningún gol y sí dos asistencias. Fue su partido 100 sin encajar gol con el Athletic.

 

Jémez se queja de la ventaja dada con el primer gol

«Si competir con el Athletic es complicado, imagina regalando un gol. Con el penalti se acabó la historia. La segunda parte casi ha sobrado. Estamos con la soga al cuello y encima damos ventaja», se lamentó Paco Jémez.

Protagonistas

Aritz Aduriz. «A estas alturas no es fácil tener estas cifras de goles y yo estoy agradecido a los compañeros, porque hacen un gran trabajo, aunque me vienen los focos a mi. El trabajo viene de atrás y personalmente estoy encantado dónde estoy. Trato de ayudar al equipo y ojalá pueda hacerlo con más goles», manifestó el trigoleador. Sobre la selección española, añadió que «no es fácil hacer esa lista y ya está. Lo que intento es dar el máximo rendimiento a mi equipo, ayudar en todo lo que pueda y todo lo demás no depende de mi», dejando claro que le gustaría acudir: «Siempre quieres progresar».

Ander Iturraspe. «Tenemos gente peligrosa arriba, el gol nos ha dado tranquilidad, pero el equipo ha seguido compitiendo bien después. Una victoria muy merecida. El equipo está en una dinámica buena y eso te da tranquilidad. Y lo de Aduriz es escandaloso, como jugador pero también toda la ambición que transmite al grupo», sostuvo el de Matiena.

Iñigo Lekue. «Contentos. Hemos sabido aguantar bien tras la expulsión», señaló un Lekue que se ofrecía a jugar en la posición de banda que considere Valverde.