Beñat ZALDUA
BARCELONA

JxSí y la CUP se reprochan mutuamente la falta de acuerdo

Junts pel Sí insistió ayer en Mas como único candidato a la Presidencia y pidió a la CUP que demuestre la voluntad de acuerdo «con hechos», algo que llevó a la formación independentista a contestar haciendo públicas las propuestas realizadas hasta ahora.

Un día después de que la militancia de la CUP avalase la negociación de candidatos alternativos a Artur Mas con Junts pel Sí (JxSí), la coalición formada por Convergència y Esquerra insistió ayer en que el actual president en funciones es el único candidato que contemplan. «No ha cambiado, nunca ha estado en cuestión», señaló de forma tajante el cabeza de lista de la coalición, Raül Romeva. Acompañado por la plana mayor de JxSí, el exeurodiputado de ICV se descartó además como presidenciable por la vía rápida: «No ha sido, ni es, ni será una opción que esté sobre la mesa».

Romeva volvió a pedir a la CUP que analice bien la propuesta de un Govern encabezado por Mas y con tres grandes áreas ejecutivas. «Se trata de que valoren esta propuesta, así de sencillo», apuntó el cabeza de lista, que pidió a la Esquerra Independentista «demostrar con hechos» la voluntad de acuerdo reivindicada el domingo en la jornada de debate celebrada en Manresa.

Algo que no sentó nada bien en las filas «cuperas», que consideran que la propuesta de las tres áreas de Govern es un refrito del pacto que CDC y ERC ya tenían apalabrado en el seno de Junts pel Sí, y que tratan por todos los medios de quitarse la imagen de enroque que se ha construido en torno a ellos. Para ello, la comisión negociadora de la CUP hizo públicas ayer las propuestas que en los dos meses transcurridos desde el 27S han puesto encima de la mesa. Según el informe publicado, la CUP planteó en primer lugar la investidura de un president de consenso «que refuerce la transversalidad y la pluralidad del independentismo». Una figura que podría ser la del mismo Romeva o la del exvicepresidente del Tribunal Constitucional Carles Viver Pi-Sunyer. En segundo lugar, planteó un «liderazgo político coral» en forma de una dirección de gobierno de tres personas. En tercer lugar puso encima de la mesa una Presidencia rotatoria y, como cuarta propuesta, una copresidencia de dos personas. Además, la CUP propuso a Mas asumir el papel de comisionado para la internacionalización del proceso, para visualizar que «trabaja por la construcción de la República independiente».

Nada indica, sin embargo, que vayan a prosperar las propuestas de la CUP, que ayer recibió loas a su coherencia desde posiciones tan dispares como las de Josep Antoni Duran i Lleida (Unió) o la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. El candidato de ERC el 20D, Gabriel Rufián, cerró filas con Convergència y aseguró que «sin Mas y lo que representa, no habrá independencia». «La mejor manera que tiene la CUP de saber si Mas va seriamente y hará la independencia es hacerlo presidente. El escenario alternativo es que Inés Arrimadas y Carme Chacón brinden», concluyó Rufián.