En la siempre complicada tarea de encajar las piezas de cara al campeonato, hoy por hoy, más seguido y que mayor beneficio económico genera a las empresas, Asegarce ha asumido el riesgo de colocar a Mikel Urrutikoetxea como zaguero de Aimar Olaizola. «En San Mateo funcionó muy bien y creemos que es un pelotari total, que puede jugar en cualquier posición y que va a dotar al campeonato de nivel. Simplemente se ha hecho por eso», argumentó Rubén Beloki, representante de la empresa bilbaina ayer en Zumaia.

Ahondando en el tema, el expelotari reconoció que «sí que hay un poco de miedo, la verdad», pero mostró su plena confianza en la técnica y las cualidades del de Zaratamo. «Sí es un cambio radical pero un chico de 1,90 y jugando con Aimar es un reto que es asumible para él», avaló el técnico navarro.

Lo mejor es que es el propio pelotari el que más convencido parece de una decisión sobre la que no tuvo «ninguna duda, me daba igual dónde jugar. La decisión la han tomado ellos y yo no tengo ningún problema, yo me dedico a jugar y a intentar hacerlo lo mejor posible donde juegue», señaló.

Más allá de lo que pudieran sufrir sus manos, el momento parece especialmente contraproducente y cortoplacista, obligando a un cambio tan brusco a un pelotari que ha tenido una progresión tan espectacular y cuando apetece ver al último campeón de las dos disciplinas individuales peleando de tú a tú, también por parejas, contra Aimar e Irujo, ahora que siguen en plenas condiciones físicas y de juego. «Yo creo que lo que frena es estar lesionado y estar en casa tres meses, lo peor es no jugar. Está claro que no es mi puesto, pero entre semana tendré opciones de hacer mis ejercicios como delantero», apuntó el vizcaino sin titubear.

Daños colaterales

Todas las decisiones suelen tener sus «daños colaterales» y en este caso está claro que el mensaje, implícito y explícito que se envía al resto de zagueros del cuadro, los deja bastante marcados. «Si hubiese grandes-grandes zagueros que tapasen ese hueco esto no se hubiera hecho ni plantear», respondió Beloki sin demasiado tacto. Hay que recordar que el año pasado Asegarce recurrió a la cesión de Zubieta para completar su nómina de zagueros, de la que también se cae Aretxabaleta, cuyo elegante y sincero gesto de ceder la plaza a Untoria el año pasado no ha sido recompensado. Como Ibai Zabala, quedará para posibles suplencias.

En Aspe, la ausencia más significativa es la de Xala, triple campeón de la competición, cuyo puesto se lo ha quedado Irribarria. Otro campeón, Abel Barriola, ha podido mantener su plaza después de que José Javier Zabaleta no haya podido recuperarse de los problemas que una verruga le está generando en su derecha. La empresa le ha esperado hasta el último instante, pero no ha sido posible.

No obstante, se mantiene la cláusula por la cual las empresas pueden sustituir a un pelotari por bajo rendimiento, por lo que las empresas siguen teniendo cierto margen de corregir su decisión inicial. De hecho, Rubén Beloki dejó entreabierta hasta la posibilidad de que Mikel Urrutikoetxea pudiera cambiar de posición durante el transcurso del torneo, dependiendo de las circunstancias. «En principio jugará de zaguero todo el campeonato pero no hay una norma establecida que no pueda cambiarse», señaló.

Sin aplazamientos

En cuanto a la reglamentación, la LEP.M fijó su determinación de no conceder aplazamientos, ni siquiera en la final, mediante una circular que fue entregada en la presentación de ayer. Así, la fecha de la final será el 10 de abril y, en caso de que un pelotari estuviese imposibilitado para ese día, se determinaría un suplente, siguiendo ciertos condicionantes.

Este suplente siempre será de la misma empresa que el lesionado y se tomarán en cuenta los resultados obtenidos en el campeonato, acudiendo al mejor posicionado. Es decir, solo en la final, el suplente sería un pelotari titular. Con esta medida se busca restar intrascendencia a esos partidos de finales de la liguilla.

El campeonato arranca el viernes en Donostia con el Berasaluze II-Beroiz ante Altuna III-Merino II y, en principio, Danel Elezkano será el único suplente, en lugar de un Aimar Olaizola que mejora de su zurda.