Aunque no se esperaba tan pronto, por probabilidades matemáticas estaba cantado. Históricamente, el Barcelona es el conjunto contra el que más veces se ha medido el Athletic en las diferentes competiciones. Sin ir más lejos, durante el 2015, rojiblancos y azulgranas se enfrentaron hasta en cinco ocasiones, última final copera de por medio. En apenas dos semanas, volverán a hacerlo en otras tres oportunidades.

Todo un clásico que, sin embargo, no hace que baje la motivación de los participantes. De «reto» lo calificó ayer Ernesto Valverde, por tratarse del «rival más difícil» que le podía tocar en suerte a la escuadra vizcaina. No obstante, la eliminatoria más cercana librada contra los culés insufla de optimismo al entorno de los leones. «A ellos tampoco les habrá hecho gracia», en alusión a la última Supercopa estatal, que está en las vitrinas del Athletic.

«No es la primera vez esta temporada que nos enfrentamos a ellos a doble partido y la vuelta en el Camp Nou. La experiencia en agosto nos dice que nuestros dos primeros partidos fueron bastante buenos. Aquel resultado fue favorable a nosotros y vamos a intentarlo otra vez. El más difícil todavía», rememoró el técnico de Viandar de la Vera.

Lo cierto es que el triunfo en la Supercopa ha sido un rara avis en el listado de los últimos tiempos de eliminatorias entre vascos y catalanes. De hecho, desde la campaña 1959/60 el Athletic no consigue apear al Barcelona del torneo del K.O. A partir de entonces, siete han sido los cruces coperos que se han celebrado entre ambos conjuntos y en todos ellos ha conseguido salir airoso el equipo culé.

En esta nueva eliminatoria ya hay horario para el encuentro de ida a disputarse en San Mamés, que será el próximo miércoles, día 20, a partir de las 21.00. Pero antes de ello, habrá duelo liguero en el Camp Nou este domingo, con el que se iniciará la segunda vuelta, y para el que Valverde no podrá contar con su ariete titular, Aritz Aduriz, que está sancionado.

Opciones para la delantera

En un escenario tan complicado para un delantero centro visitante como es el campo blaugrana, las opciones del preparador rojiblanco bien podrían pasar por alinear un ariete rápido con el objetivo de buscar la espalda de los centrales locales y también con la suficiente potencia física como para ser la primera línea de presión hacia el rival. Ese perfil lo cumple a la perfección Iñaki Williams, quien ya jugó de inicio en dicha posición en la ida copera contra el Villarreal en San Mamés.

Otra alternativa pasaría por dar entrada a Borja Viguera como futbolista más adelantado, pero el atacante riojano apenas ha disputado dos partidos completos esta temporada –ante el AZ Alkmaar en Holanda y frente al Linense en tierras andaluzas–, por lo que parece aventurado sacarlo de inicio ante un rival de tanta entidad.

Pero, el entrenador rojiblanco no solo tiene problemas para confeccionar un ataque con garantías, sino que también los contratiempos se le multiplican en defensa, ya que Aymeric Laporte «tiene un problema en la espalda» y es duda.

Renovar a Williams, punto caliente

Es muy probable que la negociación llegue finalmente a buen puerto, pero el tira y afloja entre el club y la representación de Iñaki Williams va a dar que hablar. No en vano, ya han llegado los cantos de sirena de la Premier, que suspiran por hacerse con los servicios del delantero bilbaino.

Ayer, Ernesto Valverde no pudo evitar hablar de la cuestión, valorando de manera positiva la posición que está manteniendo Ibaigane. «El club está intentando cerrar el acuerdo y se está prolongando más de la cuenta. Está muy encima de ello y queremos hacerlo. Espero que se resuelva y el club, también, que está haciendo un gran esfuerzo para que se quede», esgrimió.

Ello no fue obstáculo para que el técnico rojiblanco reconociese el valor que puede tener para la escuadra vizcaina mantener un jugador de las características de Williams. «El talento y el gol en la delantera es muy difícil de trabajar porque se tiene o se compra, que es lo que hacen el resto de los clubes», admitió. N.M.