Pablo CABEZA
bilbo
Elkarrizketa
JESÚS EZPELETA
RESPONSABLE DEL FESTIVAL MINNUENDö DE AZKOIEN

«Haken es una de las bandas con más proyección dentro del progresivo»

El festival de rock sinfónico-prog Minnuendö, que se celebra en Azkoien este sábado, llega a su edición decimotercera. Cuenta con las actuaciones de Rediscover, Special Providence y Haken, cabeceras de cartel. Es la única muestra en la península de contenido sinfónico-progresivo, circunstancia que sirve, de paso, para recordar un género que cautivó en los setenta/ochenta y que regresa con fuerza.

El rock sinfónico tuvo su momento más rutilante en la década de los setenta. Fueron años de una belleza adictiva, subyugante. Quedó reflejada en el primer disco de Itoiz y recuperada cuarenta años después por una banda de Oñati llamada Zingira, quien ha debutado con un espléndido álbum de aire sinfónico. Por el medio hubo pequeños intentos de aproximación, como la intensa historia de los navarros 2112, nombre tomado de uno de los disco de Rush.

En la actualidad, como ya ocurrió en el pasado, el sinfónico se mezcla con el progresivo y es este último género el que está retomando con fuerza el camino. Minnuendö es el testigo precisamente de las nuevas formaciones que continúan proponiendo sinfónico-progresivo, como lo muestra en el nuevo cartel formado por Rediscover, Special Providence y Haken.

Rediscover (18.00, plaza del auditorio)) está formado por el multiinstrumentista de Lodosa Javier Ezpeleta, afincado en Madrid, y el guitarrista barcelonés Isaac Ramos. Apuestan por rendir tributo a grandes bandas de rock sinfónico-progresivo, pero desde un estilo personal, acústico, directo, y diferente… Versionarán a Transatlantic, Yes, Steven Wilson, King Crimson, Pain Of Salvation, Anathema… Contando con alguna colaboración.

Special Providence (20.00, auditorio) es una banda de Budapest por cuatro alumnos, graduados en la Academy of Music y Kobánya Music Studio de Liszt. La Banda tiene cuatro discos en estudio y uno en directo. “Essence of change” es su último trabajo. El sonido instrumental de la banda está basado en una mezcla de rock fusión y metal progresivo instrumental liderado por la guitarra solista. Un sonido enérgico y dinámico, con pasajes delicados y ataques frontales.

Haken (22.15) es una banda de metal y rock progresivo formada en Londres en 2007. En febrero de este año publicaba su cuarto disco, “Infinnity”, con una edición deluxe con un segundo cedé en clave instrumental. Voz cálida y por momentos áspera. Suenan voluminosos, contundentes y descriptivos, con muchos juegos rítmicos. El grupo tiene publicados tres discos más, “Aquarius”, “Visions” y “The mountain”, además de un EP lanzado en 2014 llamado “Restoration”. Dream Theater puede ser una referencia.

«Comenzamos en 2004, hace ya trece años por lo que han pasado muchas bandas. Siempre queda en el recuerdo, quizá por motivos emocionales, la primera edición con sus nervios, la inexperiencia, la tormenta que nos cayó y que nos obligó a terminar el festival a las seis de la mañana». Tras el festival toca relaciones: «Con bandas como Arena, Focus, Threshold, Pendragon… el sábado por la mañana los llevábamos a ver Olite e Iruñea. Otros como Quidam o Mostly Autumn se subían al monte de Peralta para ver nuestros restos antepasados, como el Atalaya, Portil de Lobos, Puerta Falsa… Restos de cuando la Reconquista. Pero ahora solo pensamos en los que vienen, Haken, una de las bandas con más proyección dentro del género. Están subiendo muy deprisa y puede que nos encontremos con un grupo que en un futuro muy corto sea un referente…».

Special Providence comparte gira europea con Haken, pero en Minnuendö será el único concierto en el que tocarán su repertorio íntegro. «Tendrán los mismos medios y tiempo que Haken, por lo que podremos ver todo su poderío, ya que son realmente muy buenos.

Minnuendö surge una noche fría del último día de febrero de 2013. «Se lió entre tres amigos, Jorge, Javier y yo. Recuerdo que nevaba y que veíamos el hecho como un buen presagio. En Francia había nacido un festival que se llamaba Crescendo y nosotros decidimos llamarnos Minnuendö, ya que sabíamos que siempre seríamos un festival minoritario, pero no por eso inferior a nadie. Hablamos con la concejala de Cultura, siempre hemos pensado que ella nos dio el empujón necesario para empezar con todo esto, ya que fue quien nos echó el órdago en la mesa, ofreciéndonos hacer algo con compromiso y que fuera anual. Así que hablamos con Mostly Autumn, RPWL, Onza y tuvimos la suerte de que los tres podían tocar. Y así fue como empezó todo»

Minnuendö intenta superar el estigma de los setenta : «Hay gente que vive muy anclada en las bandas de los 60, 70 y 80. Reconozco que los setenta fueron mágicos, ¡pero hoy en día hay bandas muy buenas! Nosotros siempre hemos apostado por bandas como Lazuli, Beardfish, Quidam, Rpwl, Glazz, etc… Este año traemos de fuera a Haken y Special Providence. Haken es una banda que la gente la compara o la ven como la alternativa a Dream Theater, solo el tiempo lo dirá, pero aquí estamos nosotros con ella y para que lo demuestren».

Aprovechando su experiencia le pedimos un consejo iniciático para los más jóvenes: «Es muy difícil, cada persona tiene sus gustos y sensibilidad, pero siempre he sido muy de Genesis y recomendaría cualquier disco, desde “Tresspas” hasta “Wind & wuthering”. De Pink Floyd me encantan “Animals”, “Wish you were here” y “The wall”. Pero en la actualidad hay grandes bandas que escuchar, como Porcupine Tree, Steven Wilson, Marillion... o los mismos Haken».

En cuanto a una banda a recuperar quizá no muy valorada en su momento se decanta por los alemanes Eloy (1969-Presente). «Hay muchas bandas que nacieron en el momento quizá equivocado y no pudieron surgir por la sombra de las grandes formaciones del momento. Para mí una de esas bandas fue Eloy en los setenta y Twelve Night en los ochenta».

En cuanto al disco que más le ha marcado subraya: «Mi hermana mayor ponía a todas horas “Second’s out” de Genesis. A mí me encanta el hard rock, escuchaba Uriah Heep, Deep Purple, Rainbow…, pero ese disco me marcó profundamente, lo habré oído mil veces».